El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, y el de Campomayor, Ricardo Miguel Furtado, firmaron ayer un acuerdo que renueva el aprobado en 1864 sobre los límites fronterizos entre ambos términos.

Según el alcalde pacense, este acta se viene renovando "cada cierto periodo" y está "legitimado" por los técnicos que "han comprobado" estos límites y que ayer se refrendaron con las rúbricas de ambos alcaldes. Celdrán dijo que "no tiene más trascendencia" pues se trata de un "protocolo rutinario" que se debe cumplimentar de forma oficial. Por su parte, Furtado corroboró que el de ayer era "un acto simbólico" porque aunque "un papel reconoce que entre España y Portugal hay una frontera", este límite "debe ser lo más invisible posible".

Este acuerdo responde al convenio firmado el 29 de septiembre de 1864 de Límites Territoriales entre España y Portugal, que contempló la frontera desde Galicia a la desembocadura del río Caya y desde la desembocadura del Guadiana en el Guadiana del arroyo Cuncos hasta Huelva, quedando por delimitar el territorio correspondiente a Olivenza, sobre el que no existe acuerdo porque Portugal lo sigue considerando luso.

Hay que recordar que Campomayor fue española pero Portugal la reconquistó en 1295 siendo consolidada por el Tratado de Alcañices en 1297. Durante los 18 días que duró la Guerra de las Naranjas en mayo de 1801, fue ocupada por el ejército español y devuelta a Portugal junto con todas las plazas ocupadas, a excepción de Olivenza, con el Tratado de Badajoz (6 de junio de 1801).

COLABORACION Aprovechando el acercamiento mantenido ayer, los dos alcaldes acordaron además intensificar los lazos entre ambas poblaciones, distantes entre sí apenas 15 kilómetros, en materia cultural, empresarial, deportes, gastronomía, jóvenes y mayores, que se traducirán en programas de colaboración.

El primero de estos acuerdos va a tener su traducción en la celebración en la Feria de los Mayores, donde Campomayor tendrá un estand. Este año se da la circunstancia de que Campomayor recupera después de siete años su celebérrima fiesta de las flores (Festas do Povo), del 27 de agosto al 4 de septiembre. Durante diez días, esta pequeña población recibirá la visita de más de un millón de personas de ambos lados de la Raya. Y para hacer partícipe a Badajoz de esta tradición, Furtado ha ofrecido la posibilidad de que en Badajoz se organicen talleres para aprender cómo se confeccionan las flores de papel, cuyo secreto "no nos queremos quedar para nosotros".