Los propietarios de los terrenos que ocupan casi medio millón de metros cuadrados en la margen izquierda de la antigua carretera de Madrid al final de San Roque, entre la rotonda en forma de ocho y la de entrada al polígono de Pealsa, han dado el primer paso para empezar a desarrollar este suelo de uso industrial y han presentado en el Ayuntamiento de Badajoz la consulta de viabilidad, que pasó ayer por la Comisión de Urbanismo. Según el concejal del área, Celestino Rodolfo, Badajoz "ahora mismo casi no tiene suelo industrial libre, cuenta con muy poco en el polígono de El Nevero, donde está casi agotado".
Rodolfo reconoció que el desarrollo urbanístico conlleva gastos importantes antes de rentabilizar el suelo. Ese es el motivo de que haya tardado tanto esta actuación, que se inició hace tres años y cuyo desarrollo pasaría por el interés de algún operador comercial, como el que en su momento mostró Ikea por estos terrenos. En este sector está prevista la implantación de las llamadas industrias escaparate, como lo son los concesionarios ya están implantados.
Urbanismo no aprobó la consulta de viabilidad porque hay una parcela que tiene que ser reclasificada, la dotación de espacios libres no debe dejarse para el final y hay que reestudiar la aportación a los sistemas generales.
