Badajoz es conocida en el mundo por su producción de tomates --oro rojo --, pues produce el 90% del cupo español, el 85% del procesado en España y el 25% de Europa, aunque en la actualidad, le ha quitado el puesto de vanguardia tecnológica el área de Vegas Altas, un punto en el que las empresas pretenden profundizar, según se puso de manifiesto en el Observatorio del Cambio, dedicado a la industria agroalimentaria.

Así, Badajoz es líder mundial en la industria del tomate, con empresas como Agraz, Conesa, Conservas Martinete; pero también en transformado de cebolla, en Agrotécnica Extremeña, que mantiene la marca Vegenat , productos liofilizados para alimentación y dietética que se venden por medio mundo.

Dentro de la industria, el mayor peso en Badajoz es del agroalimentario, que reúne empresas como Aspex, dedicada a salsas; Findus (precocinados); Ulbasa (espinacas); Pyalsa (maíz dulce); Unión Comercial Forrajera (secado de alfalfa), en Villafranco; Nevado (patatas fritas); la cooperativa de agricultores de Guadiana; o la fábrica de Ribera de Rivilla, que embotella en tetrabrick.

SECTORES Dentro del sector de cárnicas, aparte del matadero municipal, en proceso de privatización, destacan las empresas Eurojamón y Señorío de Montanera, con sus instalaciones en Rincón de Caya, que con temperatura y humedad controlados con nuevas tecnologías tiene un 30% de la DO extremeña. Están también Los Riscos (agua); en vinos, Viña Telena y Coloma; en lácteos, Coolex y Láctea Valdelacalzada, y en otro apartado, la embotelladora de Coca Cola.

En total, el sector, sin los subsectores del agua, el vino y la cárnicas, sólo los productos ortofrutículas, tiene una facturación estimada de unos 500 millones de euros, tiene 420 empleos fijos, mil más en campaña y 70 profesionales titulados. No es el sector que más aporta a la economía pacense, pero sí el mayor dentro de la industria, aparte de la venta de automóviles, según la documentación aportada en un seminario sobre el Guadiana.

INVESTIGACION Otro aspecto destacado es la existencia de importantes centros de investigación y conocimiento, públicos y privados, como Ctaex, la universidad, Santa Engracia, La Orden, Intae e Intra.

Los elementos primordiales para potenciar este sector en Badajoz lo constituyen su carácter de ciudad de servicios y fronteriza, "muy atractivo para los profesionales que trabajan en el sector, y que te permite traer personal formado, que tiene capacidad de elegir su lugar de residencia en función de la calidad de vida, por eso es un factor clave", según los expertos.

Asimismo, las comunicaciones, "otro factor clave", han pasado de ser malas a estar bien y con mejores perspectivas de futuro con las nuevas autovías, el aeropuerto y el Ave, pero tanto o más, con el tránsito de mercancías de alta velocidad y el proyectado parque logístico de transportes en Caya. En contra, la industria agroalimentaria pacense tiene que no es generadora de nuevas tecnologías y debe importarlas de Cataluña e Italia. En cuanto al futuro, pasa por productos más elaborados, precocinados o platos preparados.

Por otro lado, Badajoz parece no podrá liderar la transformación de productos de Alqueva, por la distancia, pero sí ser centro de los servicios, el conocimiento y las tecnologías.