Licenciado en Derecho, dedicado al urbanismo con Joca Inmo en Badajoz y tras desarrollar su profesión como autónomo marchó a Madrid, donde entró en el sector tecnológico de nuevos materiales basados en el grafeno. Alejandro Ayala logró convencer a una serie de inversores del potencial de su ciudad y en la actualidad preside la sociedad inmobiliaria Civitas Pacensis y varias startups vinculadas a las nuevas tecnologías en torno al grafeno. Ligado al proyecto de una futura fábrica de baterías de litio, augura para Badajoz «un cambio radical».

-Civitas Pacensis anunció hace un año en Badajoz que construirá un barrio sostenible con una nueva movilidad y con la filosofía de cambiar el modelo de urbanismo y de vida en la ciudad. ¿Es muy ambicioso o es inevitable andar nuevos caminos para estar en el futuro?

-Creo que al urbanismo, la promoción inmobiliaria como tal, había que darle una vuelta. No podemos ser ajenos a todos los movimientos que se están produciendo en el mundo. Nos dirigimos a ciudades mucho más sostenibles, con unos espacios verdes, abiertos, con la situación de la pandemia, con el teletrabajo y la gente en sus casas tenemos que hacer que el entorno sea lo más agradable posible. Apostamos por promociones en las que estar en tu casa sea un placer; y apostar por los materiales grafénicos, el proyecto del que venimos, con pinturas que te dan una calidad de vida especial, libres de virus y de bacterias, que absorben 2,8 kilos de CO2 por litro; vamos a meter parkings eléctricos para que se puedan cargar los coches, un sistema de recogida de basuras superinnovador. En definitiva, apostar por una tipología de vivienda distinta, acorde con los nuevos tiempos.

-Afirma que cree en el potencial de desarrollo de Badajoz y que ha convencido a inversores para que crean en ello. ¿En qué se basa?

-En que creo que Badajoz no ha aprovechado en su historia la situación transfronteriza con Portugal. Esa posición, la universidad, convertirnos en referencia sanitaria con el complejo hospitalario, el nuevo hospital si Dios quiere de Quirón, el de Ribera Salud, la nueva Facultad de Medicina. Creo que Badajoz tiene todas las condiciones para pasar de ser la gran olvidada a aprovechar una plataforma logística ya en marcha, donde ya hay muchas empresas que se van a instalar, una frontera con Portugal, y para convertirnos en un vehículo necesario para el crecimiento de la Extremadura española y portuguesa. Yo trasladé a mis socios que Badajoz llevaba diez años parada porque el Plan General se aprueba en plena crisis; que en diez años se había hecho muy poca vivienda; que teníamos una ocasión única para podernos asentar en la ciudad con un proyecto a largo plazo, porque queremos quedarnos mucho tiempo, no hacer una promoción e irnos. Y al final se decidieron y tengo la suerte de contar con apoyo muy fuerte de inversores de Madrid, de Barcelona, de Valencia, que creen en Badajoz y que están dispuestos a emprender esta aventura en la que ya hemos hecho un desembolso muy importante, porque la idea nuestra es crecer sin deuda, así que creceremos lo rápido que la ciudad quiera que crezcamos.

-¿Cómo afronta avanzar al ritmo que indique la ciudad con la diversidad de proyectos que plantea?

-De aquí a Navidad esperamos tener 250 viviendas en marcha, que se venden a un ritmo razonablemente bueno, y en el año que viene la idea es arrancar con entre 500 y mil, principalmente en la avenida de Elvas, donde entendemos que se concentra el trabajo, por el polígono El Nevero, la plataforma, hospitales, universidad; que la gente pueda ir al trabajo andando, volver a casa a comer y disfrutar de una vida muy cómoda en una ciudad acogedora.

-Su propuesta es anterior a la pandemia de covid. ¿Afectará la crisis sanitaria al modo de plantear el diseño de las viviendas?

-Afortunadamente, cuando hicimos el planeamiento fue con una apuesta decidida por la sostenibilidad de la edificación, por una forma ecológica de crecer y con todos nuestros materiales del mundo del grafeno. Nuestro proyecto se anticipó a esta situación con la primera pintura anticovid del mundo, certificada, que absorbe CO2, con sistema de almacenamiento energético, puntos de carga de automoción. Todo lo desarrollado, al suceder la pandemia. viene como anillo al dedo al proyecto planteado previo a esta desgracia.

-Su sede social está en Badajoz y en ella pagarán sus impuestos; y desde aquí quieren expandirse al resto de España. ¿Qué significa esta decisión y en qué ámbitos pueden expandirse desde aquí?

-En Civitas Pacensis, el nombre es porque nace en Badajoz, haciendo honor a su gentilicio, como promotora inmobiliaria queremos una empresa extremeña que crezca en Badajoz para ir a Extremadura, irá a Cáceres y a otras ciudades de la comunidad, y saltaremos a España, ¿Porqué no pensar en grande, ser la primera promotora con sede local para convertirse en nacional?

-Mantiene que ni tienen ni buscan subvenciones, que han invertido 36 millones en suelo propio, sin deudas con los bancos. ¿Es el modo de generar confianza y credibilidad?

-En la crisis inmobiliaria de 2008 a 2010, una de las causas por las que se cayó el negocio era porque todo iba financiado y era una forma de crecimiento artificial. Pensamos que nosotros vamos a crecer lo que los bolsillos aguanten y a partir de aquí: se hacen 100, ¿se venden? Adelante; ¿se venden 50? Pues 50; ¿se venden 500? Pues 500; como el suelo está pagado, ahí está el tiempo que sea y a seguir comprando suelo en Badajoz para instalarnos cada vez de una forma más sólida y definitiva en la ciudad.

-¿Es necesario al plantear ciertos retos contar con un colchón de solvencia económica, además de un cierto ideal sobre cómo hacer las cosas y de pasión?

-Sin la pasión que hemos trasladado a los inversores es muy difícil vender. Desgraciadamente no somos capaces de vender la comunidad autónoma tan maravillosa que tenemos. Todavía nos asocian a un paisaje maravilloso, a un entorno natural estupendo, pero no se planteaban venir para crear empleo, industria, riqueza. Sin esa pasión de decir apostemos por Badajoz porque es una ciudad que tiene todo por hacer, apostemos por una ciudad jovial y acogedora cuyo verdadero patrimonio es su gente, no sería posible. Los fui convenciendo, vieron que era verdad lo que les decía y ahora son ellos los que quieren hacer esto en Badajoz, lo otro también. A lo mejor salen más proyectos del grupo para instalarse aquí.

-¿Qué proyectos? ¿A qué se refiere cuando dice que van a pasar cosas importantes?

-Estamos en negociaciones para que salgan proyectos muy importantes, aún no definitivos, pero van por buen camino. Esperamos a corto plazo dar muy buenas noticias. La ciudad va a pegar un cambio radical.

-Se mueve en varias líneas de desarrollo, también en el tecnológico con productos grafénicos y una fábrica de baterías de litio en la Plataforma Logística. ¿Cómo va?

La fábrica sería de litio con grafeno. Somos una empresa que se dedica a producir materiales grafénicos y hemos desarrollado distintas líneas, pintura y mortero, baterías y supercondensadores, materiales médicos y compuestos y muchos de esos son aplicables tanto en las baterías como en la construcción. Pronto podremos decir más sobre la fábrica. Lo más importante es lo que hemos conseguido, no yo un poco como embajador, la ciudad, es atraer la atención de inversores importantes que apuestan por Badajoz para una tipología de materiales que conviertan Badajoz en referencia y modelo a nivel nacional. Vamos a meter tecnología punta en huella de carbono, productos con todos los certificados, para que tu casa sea un árbol que absorbe contaminación, y convertir la ciudad en una smart city también en movilidad eléctrica.