En tan solo tres noches de flamenco y fado el auditorio municipal Ricardo Carapeto logró reunir a 5.300 espectadores, a los que habría que sumar cientos de personas que permanecieron en los alrededores para escuchar fuera la música que se hacía dentro.

Los responsables de Badasom reconocieron que tenían "miedo" de no poder superar el éxito de la edición del año pasado, que contó con el maestro Paco de Lucía, pero la respuesta del público a unos artistas de gran nivel ha superado la que se esperaba. Tanto José Mercé con Gisela Joao, el primer día, como Mariza con Javier Conde, el segundo, llenaron el auditorio, con 2.000 espectadores, mientras que el sábado, que se dedicó a un público más joven, Miguel Campello y Sara Tavares reunieron a 1.300 personas.

Ayer comparecieron en el teatro López de Ayala en rueda de prensa para hacer balance la directora del Centro de Artes Escénicas y de la Música (Cemart), Milagros Rodicio; la concejala de Cultura, Paloma Morcillo, y el director del festival, Francisco Camps. Fue el momento de echar la vista atrás pero también hacia adelante y tanto Morcillo como Rodicio se comprometieron a que Badasom siga creciendo, si no en número de días porque el presupuesto no lo permita (este año sólo han sido tres, uno menos que en la edición anterior), sí en mantener y superar la calidad del cartel. La directora del Cemart subrayó que "el compromiso existe para igualar, para mejorar y para ampliar siempre y cuando las capacidades presupuestarias lo permitan". El presupuesto del 2014 ha sido de 250.000 euros.

Rodicio remarcó que Badasom "se ha convertido en un festival único, una marca de excelencia que muestra la cultura, la música y el alma de dos pueblos hermanos". Y destacó además que esta cita es "un polo dinamizador" de la economía y el turismo de la ciudad.

LLENO Muchos de los espectadores que han acudido a los conciertos procedían de Madrid, Sevilla, Salamanca y Huelva, además de Portugal. Como coincidió con el campeonato de natación, la ocupación hotelera ha estado al 100%, por lo que incluso algunos tuvieron alojarse en Elvas. Tanto Rodicio como Paloma Morcillo destacaron además el empleo que moviliza el festival, pues más de 40 personas son necesarias para el desarrollo del programa.

Camps, por su parte, valoró que todos los artistas que ha participado en esta edición, cuando han terminado los conciertos han compartido en las redes sociales comentarios "fantásticos" de la experiencia en festival, del trato del público y de la ciudad "y poco a poco se van convirtiendo en sus embajadores".