Banca Etica concede 120 préstamos por valor de 80.000 euros desde su fundación

Banca Etica comenzó hace 8 años con 20 ahorradores y sus primeros 17 préstamos. Entonces el capital ahorrado era de solo 7.345 euros y el dinero prestado ascendía a 5.632 euros. Hoy, el número de ahorradores casi se ha multiplicado por tres, son 59, el capital de la asociación alcanza los 44.875 euros y tienen prestado 9.413 euros, según los datos facilitados por Fernando de las Heras, cofundador de la asociación y miembro de la Comisión de Estudios y Valoración de Préstamos.

En el 2008 se prestaron más de 10.000 euros; en el 2009 se superaron los 11.700; y en el 2.010 la cifra bajó hasta los 9.500 euros. De las Heras afirma que la crisis no ha incrementado el número de solicitudes, aunque sí ha hecho que se sumen al proyecto nuevos ahorradores. "Quizá por la difusión y hay personas que optan por sacar dinero de la banca tradicional por lo que conlleva eso, como que el Estado tenga que utilizar dinero de todos para cubrir sus necesidades y ponerlo en un sitio donde le encuentran mayor sentido", apunta.

La mayoría de los clientes de Banca Etica son personas inmigrantes, que necesitan dinero para cubrir sus necesidades básicas o hacer frente a emergencias y no encuentran respuesta en la banca tradicional. La asociación también ha prestado dinero para financiar algunos proyectos sociales, media docena hasta la fecha. Todos deben tener un beneficio social, ser respetuosos con el medio ambiente y con los derechos humanos.

¿Quién presta y quien recibe? El perfil del ahorrador de Banca Etica --explica Fernando de las Heras-- es el de una persona que prefiere un beneficio estrictamente social y no un interés económico. "El interés es que sabe dónde está su dinero y para qué se va a utilizar. Conoce exactamente su destino porque el proceso es absolutamente transparente". El ahorrador solo debe cumplir un requisito: su aportación máxima no puede superar el 20% del total de los fondos ahorrados por la asociación.

GARANTIAS El ahorrador sacrifica la rentabilidad económica de su dinero, pero eso no significa que lo pierda, pues se garantiza "la devolución íntegra del capital ahorrado". El índice de morosidad es muy bajo.

Al otro lado está el prestatario. Pagar las matrículas de los hijos, sufragar el alquiler o devolver los préstamos "abusivos" que han contraído en sus países de origen para poder venir a España son algunas de las causas más frecuentes que llevan hasta Banca Etica a los solicitantes.

Para que una persona sea beneficiaria de un préstamo es imprescindible la figura del avalista, quién ofrece las garantías sobre el prestatario. "Es una relación de confianza. Nos dice quien es esa persona, nos informa de su situación y su compromiso y responsabilidad para poder pagar el préstamo", explica De las Heras. El avalista se compromete también a hacer un seguimiento y a acompañar la "vida del préstamos", además de aportar un 20% de la cantidad prestada, que se le devuelve después.

El prestatario, además de tener avalista, debe cumplir unos requisitos. Primero tiene que acreditar y justificar el motivo del préstamo, y Banca Etica realiza un estudio de su situación económica. Si se le concede, se firma un contrato de préstamo de devolución, en el que el prestatario decide las cuotas que pagará, para que le sea "fácil y cómodo". Hay un tiempo máximo de 3 años para devolver el préstamo íntegro.

Lo prestado en un primer préstamo no puede superar el 5% de lo ahorrado. En este momento, 3.000 euros sería la cifra tope.

¿Dónde está el dinero de Banca Etica? Ahora mismo en Caja Badajoz, pero el objetivo último es depositar el dinero en una cooperativa de crédito llamada Fiare. Se trata de un proyecto a medio plazo si el Banco de España concede la licencia para que se instale en territorio español como socia de la Banca Populare de Italia.