El colectivo Campamento Dignidad denunció ayer que el Banco de Alimentos le ha negado su participación en el reparto de productos del mes de diciembre y que su presidenta no quiso recoger el escrito con la lista de las familias necesitadas que acuden a este grupo a solicitar ayuda alimenticia. Dicha lista se la habían pedido en fechas anteriores. Marisa Prudencio, portavoz, manifestó que el colectivo distribuyó alimentos en octubre a 45 familias, en noviembre a 176 y para para este mes tienen un listado de 278, pero la presidenta de la fundación no les las bolsas correspondientes "porque dice que los alimentos los recopila ella y que no nos los da porque los utilizamos para protestar en público".

Los portavoces del grupo afirmaron que "claro que protestamos y denunciamos a los responsables de la crisis que está causando esta situación, y que luego quieren aparecer haciendo caridad, pues el Banco de Alimentos está en manos del Opus. Muchas personas prefieren pedirnos a nosotros los alimentos que de Cáritas o Cruz Roja". Además, señalaron que "la fundación recibe dinero público y el grueso de alimentos también lo es pues los aporta el Fega, por lo que no pueden hacer este tipo de discriminaciones", señalaron.

Carmen de Aguirre, presidenta de la Fundación Banco de Alimentos, manifestó a este diario que en efecto se negó a darles los productos "porque no cumplen los requisitos y no hacen un reparto digno". Señaló que "ellos van a acojonar a la gente, así te lo digo". Y añadió que "les pregunté si tenían almacén, dijeron que sí y luego reparten alimentos a las puertas de Asamblea, en el suelo y llamaron a la televisión diciendo que era un reparto simbólico, sin dignidad ninguna".

De Aguirre señaló que "nunca se ha utilizado a los pobres como arma política y arrojadiza, lo que me pareció indigno y por eso cerré las negociaciones con ellos. Vinieron hace una semana y se pusieron en la puerta. Entró Cañada y le dije que no cambiaría de opinión, que en Mérida hay asociaciones a las que se les da alimentos y que no se los van a negar a esas familias. No han cumplido con las normas y no quiero discutir con ellos".

Por otro lado, Campamentos Dignidad reclama el pago de la renta básica "antes de finalizar el año a los 8.000 perceptores que reconoce el propio Gobierno, no a 305, aunque son muchos más, porque hay 18.000 solicitudes".

Durante la mañana de ayer, participaron en un acto de apoyo al campamento surgido en Montijo, de dos familias en paro de larga duración "que ya no tienen nada, ni a donde ir", dijeron.