El ayuntamiento publicará la próxima semana un bando en el que se prohibirá la venta de comida en la vía pública durante los días del Carnaval. Con esta medida se pretende erradicar los carromatos que algunas personas instalaban en medio de la calle para vender bocadillos y otros alimentos "por seguridad alimentaria", según anunció ayer el concejal de Policía Local, Alejandro Ramírez del Molino. En el bando también se pedirá a la población "que colabore no comprando esos alimentos".

El concejal rogó a los hosteleros que, al margen de que se instalen urinarios en distintos puntos de la vía pública, "colaboren no cerrando los servicios de sus establecimientos".

Ramírez del Molino compareció ayer tras la reunión de la Junta Local de Seguridad en la que se acordó el dispositivo especial para los días del Carnaval, que se celebrará del 16 al 20 de febrero, y en los que se cortará el tráfico en los ejes de San Juan y Santa Marina, los escenarios habituales del Carnaval las noches del sábado y el lunes, desde las doce de la noche hasta las cinco de la mañana. Este año se ampliarán las zonas acotadas, ya que se cortarán al tráfico la avenida Juan Carlos I y la plaza de Minayo.

Al parking ubicado en San Atón solo se podrá entrar y salir por la calle Zurbarán, ya que se anulará la entrada por la plaza Minayo.

También se impedirá el tráfico el viernes a partir de las 17.30 horas en la avenida de Europa, desde la fuente de la Constitución hasta la plaza de España, por donde discurrirá el desfile infantil.

Ramírez del Molino recordó que los coches aparcados deberán ser retirados por sus propietarios el domingo por la mañana en aquellas avenidas por donde transcurra el desfile.

La Junta Local de Seguridad acordó un número de efectivos policiales que prestarán 245 servicios en el caso de la Policía Local y 261 servicios por parte de la Policía Nacional, además de los efectivos sin uniforme, que harán otros 109 servicios.