El Museo Provincial de Bellas Artes, de Badajoz, presentó ayer las 33 nuevas obras que se han incorporado a sus fondos, procedentes de las adquisiciones, donaciones y depósitos realizados en los años 2005 y 2006, de un gran valor tanto artístico como económico, pues éste se estima que está en torno a los 192.000 euros, según manifestó ayer a este diario su director, Román Hernández Nieves.

Se trata de cuatro obras del artista extremeño ya fallecido Luis Alvarez Lencero, para la colección de esculturas; de una importante obra de Juan del Castillo para la colección de pintura antigua; o en el apartado de donaciones, el legado del eminente extremeño Bonifacio Lázaro por parte de su hija Ana Lázaro y que supone la única representación de imaginería religiosa del periodo barroco, de cinco piezas, que tiene el museo.

Hernández destacó de Lencero la obra Sirena varada , "la segunda más importante después de la de Vietnam", el citado legado de Lázaro y, desde luego, la obra Desposorios místicos de Santa Inés , de Juan del Castillo, maestro del ilustre barroco Bartolomé Esteban Murillo, "que trabajó con Zurbarán y Velázquez", de la escuela sevillana del XVII.

También destacó los bocetos de Alberto Dulce Vaquero, "porque muestran el proceso de producción de una obra de arte"; y sobre todo, "el depósito del Prado, que es una joyita, Bajo toldilla, del cacereño José Bermudo Mateos, así como las donaciones de obras de Alberto Duce, Juan Tena Benítez, García de la Riva, Jiménez Carretero, Jaraíz, Avelino Pérez, Coloma, Morán Cruz y Pedro Roque, entre los contemporáneos.