Que ´la belleza está en el interior´ es algo que pudieron comprobar las 200 personas que desafiaron el calor y visitaron ayer algunos monumentos de Badajoz que habitualmente permanecen cerrados. La segunda visita guiada por estos enclaves que organiza la Concejalía de Turismo a través del Centro de Información Turística y Acogida de Visitantes (CITAV) de las Casas Mudéjares, atrajo a personas de toda la provincia y de otras comunidades como Castilla y León, Asturias, Andalucía o Madrid.

La ruta se inició en las Casas Mudéjares y continuó en la torre de Espantaperros. En las casas consistoriales Fernando Fuentes, técnico del CITAV, explicó el motivo por el que los historiadores tardaron años en averiguar la ubicación de este edificio. "El centro de la ciudad se trasladó desde la plaza alta a la plaza de España en el siglo XVIII. La casa consistorial pasó a manos privadas y se utilizó como vivienda", comentó Fuentes, quien añadió que durante las obras de rehabilitación del edificio "aparecieron los arcos, las columnas y finalmente la ´pista´ definitiva fue el escudo que preside la sala", señaló Fernando Fuentes.

Desde la torre de Espantaperros o Puerta Palmas podía contemplarse toda la ciudad. Quizás el paisaje o alguno de los monumentos inspiró a Vera Regina Affonso Basilio, una pintora brasileña afincada en Italia que participó en la visita y que aprovechó para hacer una observación para que el Casco Antiguo no pierda su encanto "no deberían transitar los coches por la plaza Alta o por las Casas Mudéjares".