«Estamos plantando las semillas del cuidado ambiental y de la riqueza natural de Extremadura». Lo decía ayer Rubén Corchado, de la Célula Bellotada Badajoz, al ver cómo más de un centenar de personas, muchas de ellas familias con niños, habían respondido a la invitación a reforestar con bellotas, árboles y arbustos la zona de Tres Arroyos afectada por el fue en el 2017 (se quemaron 7 hectáreas). Pequeños y mayores se afanaban en cavar sus hoyos en la tierra con los zachos, introducir los plantones y colocar los protectores con el objetivo de garantizar las mejores condiciones para su desarrollo.

Los participantes se dividieron en grupos y varias personas ejercieron como coordinadores, ya que habían participado en un taller de formación previamente. Las bellotas que se plantaron fueron recogidas en octubre y Rodrigo Ibarrondo, promotor de la iniciativa Gran Bellotada Ibérica y presidente de la Asociación Reforest-Acción, fue el encargado de dar las claves para hacerlo de manera correcta: la bellota, que tiene que ser local, se debe depositar bajo la tierra en horizontal y después pisarse el terreno para no despertar las ‘sospechas’ de jabalíes u otros depredadores.

Pedro Gallello fue una de las personas que, junto a sus hijos pequeños -que acudieron con sus cubos y palas de la playa-, se sumó a la invitación de Célula Bellotada Badajoz. «Me interesa ayudar desde la raíz, no solo hablando y poniendo post en el Facebook», comentaba.

«El gran éxito es que se haya popularizado un acto tan útil y tan necesario como sembrar semillas para que crezcan árboles, que antaño se hacía y ahora se ha perdido», destacaba Rodrigo Ibarrondo, quien se congratuló de que el proyecto la Gran Bellotada Ibérica, surgido durante los trabajos de reforestación de Sierra de Gata, sume ya centenares de células en España y Portugal, más de 20.000 participantes y 400 colectivos, 120 escuelas y 75 ayuntamientos adheridos. «Es necesario que instituciones y colectivos de cada zona se apoyen mutuamente, porque la idea es que esto se mantenga a largo plazo, que salgan como champiñones iniciativas como estas y que en 20 o 30 años la península se llene de árboles», defendía.

Las plantas sembradas se iban a geolocalizar para que cada participante pueda seguir su desarrollo. Se plantaron alcornoques, encinas, pinos piñoneros y arbustos autóctonos cedidos por la Junta, el instituto Nuestra Señora de Bótoa y la Concejalía de Medioambiente, que también aportó las herramientas, los protectores, balizó la zona con cinta para que no se transite por allí y entregó a los asistentes una guía sobre la flora y fauna de Tres Arroyos. El concejal del área, Jesús Coslado, que se encontraba entre los participantes, aseguró que se encargarán de regar las plantas cuando no llueva.

Rubén Corchado se mostró muy satisfecho por la respuesta obtenida por la Célula Bellotada Badajoz, pero recordó que la acción de ayer no queda en solo en una siembra de domingo en Tres Arroyos, sino que debe darse continuidad a esta iniciativa que trata de actuar de manera directa contra el cambio climático y la desertificación.