La biblioteca municipal del Cerro de Reyes reabrirá en su nueva ubicación a principios de abril, según confirmaron a este diario desde el ayuntamiento. La obras para acondicionar parte de los salones de la antigua parroquia de Jesús Obrero (en la calle Santa Luisa de Marillac), que el arzobispado ha cedido al consistorio por diez años, estarán prácticamente terminadas la próxima semana y listas para que se pueda instalar el mobiliario.

El espacio que ocupará la biblioteca tiene unos cien metros cuadrados y se ha levantado un tabique para separarlo del resto de dependencias. Miguel Macías, encargado de la obra, que acomete la empresa Pinturas y Reformas Decortex, explicó que la adecuación del local ha consistido en sustituir al completo las instalaciones de saneamiento y electricidad, colocar techos desmontables y construir dos aseos --uno de ellos adaptado para personas discapacitadas--. También se ha mejorado la rampa de acceso al inmueble y, aunque el suelo se ha mantenido, se pulirá y abrillantará.

Las instalaciones contarán con calefacción y aire acondicionado mediante cuatro split (bombas de frío-calor). Los pintores también están trabajando ya en el local. Las paredes se lijarán y se pintarán en dos tonos distintos de crema tostado, mientras que las puertas exteriores, que se mantendrán, se pintarán de gris. "Pensamos que para el viernes ya quedará muy poco que hacer aquí y si no pasa nada, la próxima semana se podría traer ya el mobiliario", apuntó Macías.

El presupuesto para adecuar estas instalaciones como biblioteca es de 30.000 euros y el equipo de gobierno, según informaron ayer fuentes municipales, aún no tiene decidido qué se hará con el antiguo edificio de la biblioteca. El futuro de este inmueble es una de las grandes preocupaciones de los vecinos, que temen que se derribe.