Maica Gómez Aguado, de 10 años, no dudó ayer en dejarse fotografiar ante la biblioteca del Cerro de Reyes en señal de protesta por el cierre de este centro que en numerosas ocasiones ha frecuentado con su prima Nerea. Acompañada de su madre, recuerda señalando la biblioteca: "hemos leído mucho aquí". Su madre asiente y asegura que "leer es lo que más le gusta a Maica".

El cierre indefinido de la biblioteca, tras la agresión al bibliotecario, impedirá a una veintena de niños que con asiduidad utilizan esta sala seguir reuniéndose entorno a los libros y los ordenadores.

Ahora Maica, a la que su madre deja salir poco, lee en su casa y en el colegio. "Me estoy leyendo algunos libros que tenemos en clase, como ´El Gafitas´ o ´La flaca y el gordo´". Tanto ella como su madre confían en que vuelvan a abrirla.

El cierre ha suscitado varias reacciones en contra. A la de la asociación vecinal, se sumaron ayer las críticas del grupo municipal socialista y las del consejo escolar del colegio del barrio, que trasladará al ayuntamiento "nuestra negativa a esta decisión arbitraria y desproporcionada, porque hay unos hechos condenables, pero no se puede perjudicar a la mayoría de los vecinos", según José Antonio Hernández, director del colegio Cerro de Reyes.

El director no disimuló su enfado. "Me parece una solución poco imaginativa, una concejala de Cultura no puede ir contra la cultura, ése es el sentir del consejo escolar. Además, el problema sigue ahí y éste es un barrio muy necesitado de cultura", señaló.

También la concejala del PSOE Antonia Márquez Anguita calificó de "despropósito" el cierre de la biblioteca. Según dijo, ha sido "la solución más barata y más fácil". El grupo municipal socialista mantiene que "la solución no es cerrarla, sino mejorarla, adecentarla y aumentar la vigilancia".

Si se adopta esta actitud frente a los actos vandálicos, se preguntó "porqué no se cierra el ayuntamiento o algunos colegios" que también han sufrido algún ataque. Anguita recordó que hay otras dependencias que disponen de vigilantes jurados, como el Museo Luis de Morales o las Escuelas Municipales de Música "¿y por qué en el Cerro de Reyes no?".