Ayuntamiento y bomberos, tras más de un año, parece que han llegado a un acuerdo para reforzar este servicio ante los problemas de falta de personal que sufre. Si en noviembre negociaron un sistema de localización, que finalmente no se materializó, ayer presentaron lo que se ha bautizado como sistema de respuesta, a través del que se garantizará que se cumpla el mínimo de 10 bomberos por turno de guardia que establece el reglamento interno, cubriendo las bajas, días de asuntos propios y otras eventualidades. Al mismo tiempo permitirá que, en caso de emergencia, se puedan incorporar los efectivos fuera de servicio que sean necesarios para atenderla.

Entrar en la lista para formar parte de este sistema de respuesta es voluntario. Cuando los bomberos sean requeridos para incorporarse a cubrir el mínimo de efectivos en el parque, los servicios se le abonarán como horas ordinarias, aunque hay establecido un fijo por estar disponibles. Ayer, en la rueda de prensa que ofrecieron el concejal de Bomberos, Javier Gutiérrez, y la concejala de Recursos Humanos, Beatriz Villalba, junto con los representantes sindicales, no se precisó la cuantía económica que supondrá este nuevo sistema pues, según el edil, no se puede estimar cuántas veces serán requeridos para incorporarse porque no haya en el parque los diez bomberos reglamentarios. Esta ha sido una de las principales quejas del colectivo, pues, según han denunciado reiteradamente, ese número mínimo por guardia no se cumple «el 90% de los días». El sistema de respuesta, que entrará en vigor el 1 de enero, también ha supuesto una reorganización en los turnos de trabajo, que serán cinco en lugar de los seis actuales.

«Aquí no hay vencedores ni vencidos», aseguró ayer Gutiérrez, quien señaló que lo que se ha cerrado es un acuerdo que fundamentalmente beneficia a la ciudad, y no a los bomberos o al equipo de gobierno. En este sentido, defendió que con esta fórmula se garantiza la seguridad de los ciudadanos y se logra un servicio más «eficiente».

Por su parte, el portavoz de la Asamblea de Bomberos, Ismael Rejas, destacó que, aunque el consenso entre las partes ha tardado «demasiado» tiempo, finalmente ha imperado «el sentido común y la voluntad», garantizando así la seguridad de los ciudadanos, pues a partir de ahora «sí tendremos recursos humanos para atender las necesidades de la ciudad», dijo. Añadió que tanto el equipo de gobierno como los sindicatos han cedido «bastante» para alcanzar este acuerdo, que hoy deben ratificar los bomberos en asamblea, Ayer una veintena de ellos estuvieron también presentes en la rueda de prensa.

Rejas añadió que se han dejado sobre la mesa otras reivindicaciones laborales por «exigencias» del sindicato CSIF, pues afectan también a otros servicios municipales. Hoy pasa por pleno la aprobación presupuestaria para la tasa de reposición del 100% en los agentes de la policía local y del servicio de bomberos.

La negociación entre sindicatos y ayuntamiento no ha estado exenta de polémica. De hecho, el acuerdo se alcanzó el martes por la noche, después de que los bomberos anunciaran nuevas movilizaciones si no se resolvía de inmediato la falta de personal.