Para facilitar las labores de los vehículos de extinción de incendios forestales, Badajoz va a contar con depósitos y tomas de agua en lugares donde no llega la red pública de abastecimiento y que están alejados de cualquier punto de suministro.

El Ayuntamiento de Badajoz acaba de sacar a licitación la instalación en cuatro puntos con otros tantos depósitos de agua de 60.000 litros, para que en mitad del campo puedan repostar tanto los bomberos del servicio municipal como los del Plan Infoex. En realidad en cada punto de abastecimiento se plantea construir tres depósitos de 20.000 litros, situados sobre un suelo de hormigón y protegidos por un vallado perimetral. La inversión será de 94.200 euros y es una de las infraestructuras contempladas en el Plan Periurbano de Prevención de Incendios Forestales que aprobó el pleno municipal en febrero, en cumplimiento de la resolución de junio del 2018 de la Dirección General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura.

El plan de Badajoz prevé la instalación de un total de 12 puntos con depósitos. Estos cuatro son los primeros y los demás se irán situando a medida que el ayuntamiento cuente con la disponibilidad del suelo, dado que la mayoría se ubican en terrenos privados y cuesta convencer a los propietarios de que cedan un trozo, según explica el jefe del servicio de Bomberos, Basilio González. Este año se van a instalar 4 y la idea es colocar otros 4 el próximo o los 8 restantes si hay terreno disponible, pues el ayuntamiento tiene un plazo de dos años. Los primeros se ubicarán en la zona de Cerros Verdes (en la carretera de Bótoa, más allá de la base militar) y en Los Pinares (cerca del cementerio nuevo) y el Manantío. El cuarto aún no está definido porque no se ha firmado aún la cesión de los terrenos. Posiblemente en Tres Arroyos.

Ahora, en caso de incendios forestales los bomberos tienen que desplazarse hasta los hidrantes más cercanos, que por la carretera de Valverde están en Las Vaguadas, por la de Sevilla en Los Montitos y en la de Cáceres en Valdebótoa o en la base militar.

Por otro lado, a cargo de la concesionaria del servicio de agua, Aqualia, se colocarán tomas de agua específicas para el servicio de bomberos sobre la redes pública en zonas de la periferia donde ahora no hay hidrantes, en urbanizaciones y en los poblados. Como ejemplo, uno se situará en el Corazón de Jesús.

Otra actuación ya en marcha que contempla el plan es la limpieza y desbroce anual de terrenos municipales en la franja periurbana, cuyo contrato licitó el ayuntamiento a mediados de julio por una periodicidad de dos años prorrogables a cuatro.

Además, todos los propietarios de los terrenos incluidos en la franja periurbana (200 metros) tienen la obligación de limpiarlos. El ayuntamiento les ha mandado una carta informativa, aunque González reconoce que se ha hecho con retraso, porque la obligación se generó cuando el plan se aprobó, en febrero, y la información se remitió en verano. «Para el próximo año ya saben qué tienen que hacer y cuándo». El que mejor ha respondido, según el jefe de servicio, ha sido el Ministerio de Defensa, que ha limpiado y desbrozado sus instalaciones, tanto en la base General Menacho, como en Sancha Brava, donde ha realizado un cortafuegos alrededor de todo su terreno, y en la colonia de la base aérea. También la Junta ha desbrozado este año parte de la cañada Sancha Brava. «Esto es una lluvia fina que va calando poco a poco, hay que insistir y vamos consiguiendo avances», apunta González.