A final de este mes los pacenses verán a los bomberos del servicio municipal de Badajoz con un nuevo atuendo. El equipo de intervención ya no es azul marino, como el que visten desde hace diez años, sino que cambia a color camel, con refuerzos gris marengo en rodillas y codos y bandas reflectantes. Según explicó ayer el jefe del servicio, Basilio González, durante la presentación del nuevo atuendo, la fabricación del traje de bombero es la segunda más "compleja", después de la de astronauta. Debe de serlo. Para su diseño se creó en el parque una comisión que se ha estado reuniendo para elegir los materiales más adecuados y el diseño que mejor se adaptase a las necesidades de un cuerpo dedicado a proteger vidas.

No ha sido fácil, pues el material con el que se confeccionen debe impedir que el calor penetre pero también que la piel se "cueza" por el sudor. El tejido elegido es un 40% polibendimidazole (PBI), un 58% para-aramida y un 2% de antiestático, una composición que aporta resistencia térmica, mecánica y al vapor de agua, los tres parámetros que el nuevo atuendo cumple con creces. El color es el natural del tejido, que no admite tinte.

Según informó ayer el concejal de bomberos, Francisco Javier Gutiérrez, se han adquirido 75 trajes, que han costado 120.000 euros y sustituyen a los equipos de intervención que tiene más de 10 años. La empresa adjudicataria los ha confeccionado a medida y el contrato incluye una limpieza anual más otra específica cuando se expongan a algún tipo de contaminación.

Gutiérrez anunció que para el 2016 se ampliará la plantilla, ocupando las vacantes por jubilaciones y con nuevas plazas (5 o 6) en la oferta de empleo público, a través de la bolsa de aprobados sin plaza. Respecto al impago de excesos de festivos que ayer denunció el sindicato USO, el concejal señaló que se han abonado los del 2014. Quedan pendientes del 2010 al 2013, por importe de unos 15.000 euros cada año.