En los tres primeros años de la llegada del gas natural a la ciudad, las empresas distribuidoras de Repsol butano habían perdido un 8% de la cuota de mercado, según reconoció el gerente de Teófilo Butano, Javier Rodríguez. De las más de 700.000 botellas de butano y propano que ambas agencias, Butagás y Teófilo Butano, repartían cada año antes de la llegada del gas natural, ahora venden cerca de 650.000 botellas.

Esto obligó a reducir costes a estas empresas, que recortaron sus plantillas, pasando de los 21 repartidores que había en Badajoz a los 19 actuales.

"Aunque la empresa de gas natural se está quedando con muchos de los clientes de las nuevas urbanizaciones de la ciudad, nosotros seguimos abasteciendo a la mayor parte de los pacenses", según Javier Rodríguez.

DOS DECADAS Este empresario mantiene que, según los cálculos estimativos realizados por el sector, "la pérdida de cuotas de mercado será lenta y progresiva, del 1% al 2% cada año, por lo que las empresas suministradoras de butano mantendremos el 70% del mercado actual en las dos próximas décadas".

En su opinión, el consumidor de butano "paga sólo lo que consume, mientras que con el gas natural hay que pagar una cuota fija de mantenimiento, eso echa para atrás a muchas personas, por eso hay zonas de Badajoz, donde las rentas son más bajas, que siguen y seguirán durante muchos años pidiendo botellas de butano o propano", según señaló.