El de Santo Domingo es el último de una preocupante lista de socavones que se han abierto en las entrañas de la ciudad en los últimos tiempos. El más meritorio fue el del puente Nuevo, donde se hundió un camión, pero también dieron que hablar el de Suárez Somontes, cuya reparación se eternizó, en la plaza de San Andrés, más abajo del hotel Zurbarán o el situado junto al edificio de Correos, con 11 metros de profundidad.

El jefe de Inspección de Aguas, Juan José Gómez, explicó ayer que están haciendo una revisión de la red del Casco Antiguo mediante cámaras de televisión para comprobar el estado de los colectores. En total se revisarán 17.000 metros. Ya han filmado en Arcoagüero, Madre de Dios, Fernando Calzadilla y junto a la fachada de Correos. Cuando se detecta algún problema se informa a la corporación municipal para que tome una decisión. El objetivo de esta actuación es prevenir para que precisamente no se abran socavones inesperados. De momento, los colectores revisados no presentan "ningún peligro inminente". Y se han podido revisar alrededor de 2.000 metros. Gómez defiende que los tramos de la red que se han ido sustituyendo no presentan ningún riesgo, pues se están montando tubos de pvc de doble capa "que son prácticamente eternos". Así se ha hecho en San Roque, La Picuriña, Llera, la margen izquierda del Calamón y la avenida principal de Las Vaguadas.