El primer teniente de alcalde, José Antonio Monago, expresó ayer un ruego "encarecido", haciéndose eco de la queja que le han expresado desde la Asociación de Vecinos de las Vaguadas, en el sentido de hacer un llamamiento para que los camiones de gran tonelaje no utilicen el camino recién asfaltado de La Banasta, para evitar que dañen el aglomerado y tratar que esta obra recién hecha perdure el mayor tiempo posible.

Este camino ha sido asfaltado por el ayuntamiento para darle una salida alternativa al tráfico de Las Vaguadas y a la entrada existen unas señales que establecen el límite en 3,5 toneladas, lo que quiere decir que los camiones que sobrepasen este tonelaje no pueden transitar por esta vía porque, entre otras consecuencias, si dos vehículos pesados coinciden en el camino, al cruzarse apoyan en los bordes y hunden el pavimento.

Monago sabe que el tráfico de estos camiones es continuo. Van y vienen a la obra de un hotel que se está construyendo en la urbanización y también son de la propia empresa que realizó el asfaltado, como él mismo pudo comprobar, con una góndola de 14.000 kilos.

"Pido por favor --insistió-- que no pasen por este camino, porque si no dentro de tres meses estamos con los baches", aventuró.