A 3.660 familias han podido atender en sus necesidades de alimentación los dos comedores sociales de Badajoz, el de las Hijas de la Caridad y el de San Vicente de Paúl, durante el periodo de confinamiento primero y de desescalada después, debido a la pandemia de coronavirus cuyos efectos se han dejado notar en muchas familias que se han quedado sin trabajo y sin ingresos. Ello ha sido posible gracias a la recaudación obtenida en una campaña desarrollada por Ibercaja y Fundación CB.
Así lo anunciaron ayer Antonio Tena, presidente de la asociación que gestiona el comedor de San Vicente de Paúl, en cuya sede tuvo lugar el acto de presentación del resultado de la campaña Vamos Extremadura; el director territorial de Ibercaja en Extremadura, Fernando Planelles; y el presidente de la Fundación CB, Emilio Vázquez.
La campaña, que surgió de Ibercaja en Zaragoza para extenderse luego, llegando aquí con el nombre de Vamos Extremadura, y recaudó entre abril y junio un total de 15.749 euros, con destino a los dos comedores.
Desde el comienzo de la pandemia, ambas entidades decidieron contribuir a paliar la saturación que sufrían los comedores sociales y que surgió «de la noche a la mañana personificada en las familias que vivían al día», señalaron Vázquez y Planelles.
La iniciativa, que inicialmente debía durar un mes, decidieron prorrogarla dado que no mejoraba la situación en os comedores y ante la creciente demanda por las familias necesitadas y en situación de vulnerabilidad». Así, las donaciones «superaban semanalmente nuevos retos», hasta alcanzar los 15.749 euros para atender a esas 3.660 familias».
Junto a la situación sanitaria preocupaba a ambas instituciones la coyuntura económica y social, la cantidad de familias que con el confinamiento vieron mermados sus ingresos o incluso los perdieron, lo que les llevó a impulsar la campaña, en la que han colaborado otras instituciones públicas y entidades privadas según Vázquez y Planelles.
Ambos coincidieron en señalar que dependiendo de cómo evolucione la situación, se podrían plantear mantener la campaña, o lanzar una nueva.
Los dos pusieron de manifiesto la función y vocación social de ambas instituciones, «labor fundamental y su razón de ser de Ibercaja», indicó Planelles, así como que la campaña ha contado también con aportaciones del grupo financieron Ibercaja y su plan de pensiones sostenible y solidario».
Vázquez incidió en que también «han colaborado muchos extremeños, personalidades del mundo del deporte, la cultura o la comunicación, que le han ayudado difusión».
Antonio Tena, por su parte, agradeció la colaboración prestada y puso de manifiesto que el comedor se encuentra ahora en una buena situación para mantener la labor social, pero que tras el aumento de una media de 48 a 55 personas diarias a las 70 u 80 en la actualidad --81 el pasado martes--, no tiene capacidad para ampliar mucho más. «no podríamos atender a 100 o 200 personas personas si vinieran», debido al espacio y a la infraestructura disponible.
En la actualidad, el comedor no da servicio presencialmente por las restricciones sanitarias y medidas de protección ante el covid-19; entrega bolsas de comida a los usuarios de lunes a sábado, con bocadillos para la noche y para el domingo. Tena anunció que cerrará en agosto por vacaciones de los trabajadores.
