TEtmpiezan las vacaciones, ese tiempo tan deseado por todos los trabajadores, que supone un paréntesis más o menos largo en la actividad laboral y que dedicamos a realizar otras actividades.

Las vacaciones pueden ser entendidas de varias formas. Como un periodo en el que uno no hace nada, simplemente descansar, bien en la playa, en la montaña o en el lugar de residencia habitual. Pero las vacaciones también puede ser utilizadas para conocer sitios nuevos, bien dentro de España o en el extranjero, opciones éstas cada vez más demandadas por los españoles.

El viajar tiene sus ventajas ya que permite a las personas conocer culturas diferentes, visitar patrimonios históricos distintos, conocer formas de vivir nuevas, etc. Todo ello nos enriquece como personas.

La primera opción es muy valida, pero en la medida de lo posible desde aquí ánimo, sobre todo a los jóvenes, para que se den una vuelta por el mundo y que sobrepasen los límites de su hábitat cotidiano. Que aprendan que hay otras formas de vivir, de pensar, de encarar la vida, de enfrentarse a los problemas. En definitiva, el salir al extranjero les servirá para abrir su mentes y les permitirá volver a sus tareas, trabajos o a sus estudios con una mentalidad un tanto diferente.

Lo más importante es que lo que hayan aprendido lo podrán llevar a sus vidas diarias y transmitirlo a la sociedad en la que viven, colaborando a que ésta sea mas abierta y plural y con ello nos beneficiamos todos.