Es una tienda para no perderse, y no por aburrida, sino porque alberga todo tipo de mapas y de información que permite localizar cualquier punto del planeta. Es la Casa del Mapa, donde se pueden adquirir desde los mapas más básicos y elementales de la Península Ibérica hasta los más específicos. Los hay históricos, agronómicos, geológicos, metalomagnéticos, forestales y también ortoimágenes espaciales.
Sin embargo, la Casa del Mapa, situada en un espacio de la subdelegación del Gobierno, en la calle La bomba, tiene los días contados, porque cerrará sus puertas este año. Aunque no se sabe con certeza la fecha concreta, es seguro que será en este año.
Esta tienda, como otras que hay en España, se abrió hace una década a raíz de un convenio que suscribieron el Centro Nacional de Información Geográfica (Cenig) y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
"Se hizo pensando en unir dos tipos de productos que tenían una demanda, según creíamos, paralela. Por un lado el mapa, al que recurren investigadores y usuarios, y por otro, la información del INE, que entre las demandas de información más frecuentes que recibe están las vinculadas a una entidad geográfica. Pensamos que ésta iba a ser una forma de potenciar los dos servicios", según el delegado provincial del INE, Luciano Nogales.
Pero parece que no resultó. "Lo que está ocurriendo es que se venden muchos mapas pero productos del INE se venden muy pocos, porque el que viene a por un dato no se lleva un libro o una publicación. Además de esto, el INE ha potenciado mucho su página web, con lo cuál el usuario que quiera un dato se puede bajar la tabla correspondiente", explicó Nogales, quien sostiene que "realmente las ventas no son suficientes para mantener este convenio".
En el 2007 la tienda facturó 13.361 euros y en el 2006 fueron 15.532. "El 99% de la facturación son productos del Cenig, mapas y publicaciones. Lo que significa que los productos del INE sólo consiguieron facturar 136 euros. Algo generalizado en todas las tiendas", según el delegado del INE.
