El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, y el presidente local de Nuevas Generaciones (NNGG), Juan Parejo, colocaron ayer simbólicamente la primera piedra del desdoblamiento de la carretera de Valverde para protestar por la tardanza de esta obra y por la discriminación que, según ellos, sufre la ciudad.

Celdrán explicó que con esta protesta no quieren sacar rendimiento político, sino denunciar la situación que se vive en esta carretera, donde desde el 99 se han producido 60 accidentes y mencionó que esta vía soporta una media diaria de 24.000 a 25.000 vehículos.