El alcalde Miguel Celdrán mostró ayer su extrañeza al conocer la noticia de que la Consejería de Cultura está realizando un proyecto parcial de rehabilitación de la Alcazaba, que se sumará al plan integral de recuperación del monumento previsto por la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Badajoz y el Ministerio de la Vivienda.

Celdrán aseguró haberle llamado la atención esta decisión, hecha pública por El Periódico el pasado miércoles, porque, según recordó, el convenio firmado por las tres administraciones "dice que ninguna institución hará pública ninguna noticia sobre el proyecto de la Alcazaba ni se beneficiará partidariamente si no están todas las instituciones presentes, y a mí nadie me ha llamado".

En este sentido, se mostró partidario de que se apruebe y se firme un proyecto global con una inversión, con el fin de que no peligre si se produce un cambio de gobierno.

Celdrán aseguró admitir "todo lo bueno que se haga por la ciudad, independientemente de con la intencionalidad que se haga", pero confesó que "este procedimiento pone en vilo la posibilidad de asegurarnos un proyecto de una sola vez".