Varios centenares de personas --500 según la Policía Nacional y en torno a mil según algunos de los convocantes-- , se manifestaron ayer en Badajoz, convocados por la Plataforma en Defensa del Hospital Provincial, para expresar su rechazo al plan director presentado por la diputación para la rehabilitación del inmueble, institución propietaria del edificio. Los manifestantes rodearon y abrazaron el antiguo hospital y exigieron que se le dé uso social.

«Esta manifestación de amor no será la última; seguro que tendremos que venir a mostrar uñas y dientes para defender el hospital», manifestó el poeta Santiago Corchete en su intervención, tras la lectura de un manifiesto por parte de ña niña Paloma Bohoyo, de 13 años, en un pedestal en la plaza de San Atón. En ella concluyó la manifestación después de una suelta de globos y de que una cadena humana rodeara y abrazara el edificio.

La respuesta ciudadana fue valorada muy positivamente por miembros de la plataforma, que reúne casi una veintena de colectivos de todo tipo. Algunos, como Antonio Manzano, de Badajoz Adelante, o José María Soriano, de la Asociación de del Casco Antiguo, ambos defensores de respetar la protección que tiene el inmueble, incluso se vieron sorprendidos por la respuesta. La diputación declinó pronunciarse.

Otros, como Remigio Cordero, portavoz de Podemos, promotor de las primeras campañas a favor de dar uso asistencial al inmueble, «sí que esperaba una respuesta así, porque no se trata solo del edificio del hospital, sino de la recuperación de la autoestima por parte de la ciudadanía, que confía en que con su movilización puede conseguir su objetivo».

Borruel, de Ciudadanos, afirmó que «es un éxito; mil personas en la calle tienen que hacer reflexionar al presidente de la diputación, que cuente con la plataforma para el uso del edificio».

Manuel Márquez, de Amigos de Badajoz, recordó que «el cubo parecía cosa de cuatro y mira cómo ha terminado; hay que escuchar a los ciudadanos y a los expertos en Historia, Derecho, o Arquitectura de los colectivos; tenemos derecho a ser atendidos».

Corchete dijo «presidentes de la diputación como Vázquez y Cortés siempre nos han recibido y animado a trabajar, por eso no se entiende que éste no nos quiera ni recibir».

La manifestación, encabezada por una pancarta que decía: «Salvar el hospital. No al plan destructor», partió después de las 12.00 de la plaza de España y bajó por la calle Obispo, que llenó por completo, para parar ante la diputación y corear eslóganes como «Gallardo, demonio, nos quita el patrimonio», o «Uso social, no comercial».

Esta protesta popular se produce un día después de que la diputación anunciara que se han presentado ocho propuesta a su convocatoria para recuperar el edificio, cuya mesa de contratación se reunirá el próximo martes y se adjudicará el proyecto definitivo en diciembre.