El centro de salud de San Roque, cuyo edificio fue cerrado hace tres años por defectos en su estructura y en su lugar hubo que construir uno nuevo, empezó a funcionar ayer, según confirmó a EL PERIODICO el gerente del área de salud, José María Vergeles. Durante todo este tiempo, todos los servicios del centro de salud se venían prestando con caracter provisional en las instalaciones del mercado de abastos, que no ofrecían las condiciones deseables.
Vergeles confirmó que el edifico que se estaba utilizando no era el más adecuado y se había acondicionado de forma provisional para que pudieran ser atendidos los pacientes, "pero no reunía las condiciones que un centro de salud debe ofrecer desde el punto de vista arquitectónico".
El anterior edificio tuvo que ser derribado porque los estudios que se realizaron para determinar si algunos de sus elementos se podría mantener, finalmente concluyeron que no cumplían criterios de seguridad y el Insalud se decidió por realizar un centro de salud de nueva construcción.
ATENCION CONTINUADA
El centro abrió ayer en horario de atención continuada, es decir, sólo las urgencias. El traslado del material se inició hace unos días y ayer se estaban acondicionando las consultas y las urgencias. Desde ayer y durante este el fin de semana, las urgencias se atienden hasta las 15.00 horas en el centro antiguo y, a partir de esta hora, en el nuevo. A partir del lunes día 5, las intenciones del Servicio Extremeño de Salud (SES) son que todo esté a punto para que las consultas de los médicos de cabecera, enfermería y pediatría ya se puedan atender en las nuevas instalaciones.
El centro de salud de San Roque atiende a una población aproximada de 20.300 habitantes, no sólo de la barriada de San Roque sino también la carretera de Sevilla.
El traslado de las instalaciones no va a implicar cambios en el personal, salvo un nuevo servicio que comienza a funcionar en el nuevo centro porque no se podía prestar en el antiguo y es la salud bucodental. Ya hay un sillón de odontología ubicado en el nuevo centro de salud.
SUSTITUTO
Vergeles explicó que el traslado de uno de los médicos de cabecera no está relacionado con este cambio de edificio, sino que el sustituto tiene la plaza en propiedad y la reclama al terminar una excedencia. Vergeles comprende que el profesional que se marcha es alguien que llevaba ya unos años en contacto con la población "pero es totalmente legal y confío en que el médico que viene ahora atienda perfectamente a la población".
En el centro de salud de San Roque trabajan nueve médicos de familia, dos pediatras, nueve enfermeros, una matrona, dos auxiliares de enfermería, cinco auxiliares administrativos, cinco celadores, dos veterinarios, un trabajador social a tiempo parcial compartido con el centro de salud de Talavera y, a partir de ahora, un odontólogo.
Respecto a la posibilidad de abrir el centro por la tarde, de momento, y hasta tanto no culmine el traslado, el acuerdo con los profesionales es que no se iba a incorporar la jornada vespertina.
A partir de que se ponga totalmente en marcha la nueva ubicación, "que permitirá prestar los servicios de atención al ciudadano con mayor calidad" se podrá hablar, pero se ha retrasado hasta mejorar las condiciones de infraestructura de trabajo, según explicó el gerente del área de salud.
