El grupo Socialista en el Ayuntamiento de Badajoz sospecha de las prisas del equipo de gobierno por programar terrenos urbanizables no programados en el Cerro del Viento estando tan próxima la aprobación de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que ya lo recoge.

Según denunció ayer el concejal socialista Juan Pérez Zarapico, el expediente data de abril del 2002 y tras haber atravesado distintas vicisitudes, en septiembre pasado se agilizó. Entre los terrenos afectados hay una parcela que, hasta octubre del presente año, estaba a nombre de la suegra del alcalde, Miguel Celdrán, por lo que Zarapico sospecha que el PP no quiere dejar el tema hasta la aprobación del PGOU, porque ya hay otro concejal que se ve beneficiado con las recalificaciones que contempla el nuevo plan y si los dos se abstienen peligraría la mayoría. El socialista aclaró que aunque no está claro que legalmente el alcalde debe ausentarse, sí tendría que hacerlo desde el punto de vista ético.

La concejala de Urbanismo, Cristina Herrera, respondió a estas declaraciones diciendo que "cree el ladrón que todos son de su condición" y mencionó el interés de los socialistas en recalificar los terrenos de Bótoa. La concejala dijo que cree que estos terrenos ya no son de la familia política del alcalde pero, que en todo caso, lo que va a pleno hoy no es la recalificación, pues ya estaban recalificados en el plan del 89 y, más aún, si el alcalde hubiera tenido interés lo habría hecho antes de las elecciones de mayo, porque podrían haberlas perdido. Según Herrera, la pretensión del equipo de gobierno con esta decisión es facilitar terreno para abaratar el precio de la vivienda.