Una treintena de trabajadores del sector de la construcción se concentraron ayer frente a la sede de la Delegación del Gobierno, convocados por la Confederación General del Trabajo (CGT) del sector de la construcción de Badajoz, para reivindicar más vigilancia por parte de la Administración con el fin de que se cumpla la legislación vigente en materia de seguridad laboral. Los manifestantes exigieron a la Administración que tome cartas en el asunto para evitar accidentes como el ocurrido el pasado día 7 en el que un albañil portugués, de 52 años, murió al caer en una obra de un chalet en la urbanización de Las Vaguadas.
El secretario de la CGT en Badajoz, Manuel Gutiérrez, anunció que este sindicato se personará como acusación particular en el proceso por la muerte de este trabajador, que, según dijo, "no llevaba casco, ni un arnés, y el hueco por el que cayó estaba descubierto, en medidas de seguridad no había nada en aquella obra". Al parecer, el trabajador fallecido tampoco tenía contrato de trabajo, un asunto que intenta confirmar este sindicato.
Manuel Gutiérrez aseguró que el 90% de las empresas "no ponen las medidas de seguridad adecuadas, sólo por ahorrarse cuatro duros" y recordó que tanto las empresas como la Administración conocen sus responsabilidades. En su opinión, se debería incrementar el número de inspectores de Trabajo.
Los participantes en la concentración colocaron tres cruces frente a la Delegación del Gobierno recordando a los tres trabajadores fallecidos en la provincia en lo que va de año, uno en enero en Villafranca de los Barros, otro en mayo en Don Benito y el último el día 7 en la capital pacense.
