La Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha iniciado la segunda fase del Plan Alberca del Ministerio de Medio Ambiente para inscribir las concesiones de aguas subterráneas para usos industriales y el catálogo de aguas privadas. Se refiere a los antiguos derechos anteriores a la Ley de Aguas de 1985, y ello permitirá completar el citado proyecto para conocer con exactitud los datos sobre volúmenes, caudales y uso de aguas subterráneas en la cuenca, y en este caso en la provincia de Badajoz. El fin es "optimizar la gestión del agua", según manifestó a este diario Emilio Luna, geólogo y responsable de la Sección de Aguas Subterráneas de la CHG.

En la primera fase, ya finalizada, se han tramitado 10.200 expedientes con unos 14.000 aprovechamientos, con caudales limitados. Los requisitos para este tipo de pozos son: uso en la misma parcela donde está captación, menos 7.000 metros cúbicos de consumo anual y caudales inferiores a 4 litros por segundo. Normalmente se trata de usos domésticos o pequeñas explotaciones agropecuaria, explicó José María García, jefe de proyecto de la compañía General de Sondeos CGS, que es la empresa encargada de gestionar el Alberca , cuyo presupuesto es de 3,4 millones de euros.

SOSTENIBILIDAD Para los aprovechamientos de usos industriales, que son de mayor entidad en cuanto a volumen, caudales y usos, la principal limitación "es que sea sostenible", según José María García, quien explicó que para estos casos, más complejos, "se les requiere a los solicitantes proyectos y planes de explotación, porque hablamos de un uso que se concede o no, en según qué condiciones".

En todo caso, si se concede el derecho a usar esas aguas subterráneas, "la Administración velará porque se cumplan las condiciones y que cualquier modificación sea aprobada, pues es un derecho tutelado", añadió Luna.

La CHG ha montado en un edificio próximo a su sede unas oficinas donde CGS desarrolla su labor actual y donde continuará con la segunda fase, para hacer un análisis más exahustivo del uso de agua. El contrato se firma la semana que entra.

INFORMES DE LA JUNTA Los proyectos que lleguen deben ser examinados para comprobar que se respetan los derechos de otros usuarios. Además, en estos casos se requiere un informe favorable de la Junta de Extremadura, que en ocasiones será la que condicione en función de sus políticas de agua, conservación medioambiental y riego. Los trabajos que ahora se inician son específicos de la cuenca extremeña del Guadiana, sobre todo de la provincia de Badajoz.

Asimismo, el pasado jueves salió a concurso la realización del catálogo de aguas privadas, o pozos antiguos, para completar otro que se realizó en el 1992, que se denominó Proyecto Arica.

HASTA EL 2001 COMO LIMITE Este catálogo tendrá como fecha límite el 1 de octubre del 2001 para cerrar la recogida de peticiones sobre derechos antiguos, y todo lo que sea posterior a esa fecha, ya no se resolverá por la vía administrativa por la CHG, sino que deberá ser un juez el que reconozca o no el derecho de esos aprovechamientos.

García afirmó que sólo en la zonas regables de las Vegas Altas y las Vegas Bajas, el volumen y la capacidad de extracción de aguas en los pozos conocidos, que no son todos, supone, en metros cúbicos, la mitad del embalse de Villar del Rey, que abastece a Badajoz y cuya capacidad es de 130 hectómetros cúbicos.

No obstante, Emilio Luna manifestó que los datos exactos se conocerán cuando se cierre el Proyecto Alberca, "nos permitirá saber el resto que hay, qué queda fuera, que hoy por hoy es bastante difícil de cuantificar". Además, señaló que "nosotros pensamos que no hay hay intencionalidad por el usuario de no declarar un aprovechamiento, pensamos que quizás ha habido tal vez un desconocimiento de la obligatoriedad de declarar, pero la gente está tomando mucha conciencia, se comienza a consolidar una conciencia sobre el uso y consumo del agua".