La fachada en la calle Ramón Albarrán no guarda relación con la enorme sala de butacas, en tres alturas, que alberga el inmueble, coronada por la impresionante bóveda de artesonado policromado. La humedad y el abandono han ido haciendo mella en el edificio del antiguo cine Pacense, el patrimonio más valioso de la sociedad Círculo Pacense, que requiere una intervención urgente. Un grupo de jóvenes ha dado el primer paso, con el apoyo de la directiva de la sociedad y, de momento, va a empezar a utilizar la gran sala donde se sitúa el escenario como local de ensayos y lugar de encuentro cultural de las artes escénicas.

Mayra Canelo y Francis Lucas son dos de los jóvenes que han puesto en marcha el proyecto, con ellos están otros artistas y grupos. "Hay gente que hace de todo, acróbatas, músicos, teatro, y que necesita un local para ensayar", señala Francis, que es clown. La idea de los promotores es empezar dentro de unos días a limpiar y adecentar el local. El escenario está hundido y pretenden recuperarlo en cuanto dispongan de los medios necesarios. De momento, utilizarán el espacio que existe entre las butacas y el escenario. "Iremos habitándolo poco a poco", relata Mayra. El proyecto incluye a más largo plazo la puesta en marcha de una escuela de nuevo circo.

SOCIOS Para empezar a utilizar las instalaciones, estos jóvenes se han hecho socios del Círculo Pacense, pues han pensado que es mejor vincularse a un colectivo que ya existe, en lugar de crear uno nuevo. Las cuotas permitirán sufragar gastos de mantenimiento y funcionamiento.

El presidente de la sociedad Círculo Pacense, Oscar Alonso, incide en que en Badajoz existe mucha gente joven con inquietudes culturales, que no encuentra un lugar donde poder desarrollarlas o ponerlas en común, porque los que hay son caros o en muy mal estado. Al mismo tiempo, el edificio se encuentra en un compás de espera, hasta tanto exista alguna decisión por parte de la Junta de Extremadura, que ya ha mostrado su interés por que este edificio histórico no desaparezca. La idea, según Alonso, es que el antiguo cine se convierta en un centro de cultura alternativa, inexistente en la ciudad.

En estos momentos, el Círculo Pacense cuenta con 60 socios. Entre 15 y 20 jóvenes más entrarían con este novedoso proyecto que, al mismo tiempo, supondrá sabia nueva y joven en una sociedad centenaria.