La ciudad de Badajoz ha sido escenario de tres crímenes en los diez últimos meses, desde el de Suerte de Saavedra en abril del 2009 al de un anciano el pasado jueves, pasando por el de una mujer a manos de su expareja en diciembre pasado, que quedó resuelto con el suicidio del asesino.

Aparte del crimen machista, permanecen sin resolver el de Suerte de Saavedra, después de que el juez archivara la causa contra los dos detenidos por la policía por falta de pruebas suficientes, y el más reciente, del anciano, que está en proceso de resolución.

Pero en total, son seis las muertes violentas perpetradas en la ciudad que continúan sin resolver, desde el año 1985. Además de los dos crímenes mencionados, está el de un estudiante de Medicina, ocurrido en el parque de Castelar. Otro fue el de un camarero y propietario de un bar en la calle Concepción. También el de un joven en la calle Eugenio Hermoso. Y más recientemente, en noviembre del 2006, el de una joven prostituta cuyo cuerpo fue hallado en el vertedero. En todos los casos hubo detenidos que posteriormente quedaron en libertad.