La Consejería de Educación y Empleo pone en marcha este curso de manera experimental un aula abierta para alumnos con Trastorno de Espectro Autista (TEA). Funcionará en el colegio Arias Montano de Badajoz, que ha sido elegido porque dispone del espacio físico necesario, según ha explicado a este diario la delegada provincial de Educación en Badajoz, Piedad Álvarez. En este centro se escolarizarán niños con TEA que requieran adaptaciones que se apartan de manera significativa del currículo ordinario y que requieren recursos personales y materiales específicos.

Álvarez manifestó que se trata de una experiencia «pionera» en Extremadura, en la que esta consejería lleva trabajando más de un año con la de Sanidad. Su ratio será de un mínimo de 3 alumnos y un máximo de 6.

Hasta ahora existen las aulas especializadas, que disponen de un cuidador, un profesor de pedagogía terapéutica y otro de audición y lenguaje. Este nuevo aula contará además con un terapeuta ocupacional especialista en la integración sensorial que trabajará la estimulación y la integración sensorial con los alumnos. La fisonomía del espacio es totalmente distinta, pues carece de pupitres. Para la delegada provincial se trata de «abrir la puerta» a niños que hasta ahora estaban en centros de educación especial, en la búsqueda de la inclusión educativa, con un seguimiento de sus pediatras, pues se requiere el compromiso de sus familias y el trabajo coordinado de las dos consejerías. Si se obtienen buenos resultados, la experiencia se extendería a otros centros.

Por otra parte, otra de las novedades de este curso es la escolarización de alumnos desde los 2 años, para quienes se han dotado aulas en el colegio Santa Marina y en el Manuel Pacheco, cuya apertura se ha retrasado hasta el lunes 24 de septiembre porque ha habido una prórroga en la petición de plazas y la lista no será definitiva hasta el día 14. Estas aulas funcionarán en horario de 7.30 a 15.30 horas y los niños dispondrán de comedor, con los mismos precios que para segundo ciclo de Infantil y Primaria. En ambos colegios ha habido que realizar obras de acondicionamiento, con una inversión de 80.000 euros.

Cada aula dispone de 18 plazas. En el colegio Santa Marina la demanda ha superado a la oferta, con un total de 39 solicitudes.Según Álvarez se debe a «la ubicación» de este colegio. No así en el Manuel Pacheco, que inicialmente recibió 5 solicitudes, pero la incorporación de niños se dejará abierta mientras existan vacantes, aunque sea enseñanza no obligatoria. La delegada provincial señaló que se decidió ubicar esta prestación en este barrio para conseguir «enganchar» a las familias del entorno y arraigarlas, pues no existen guarderías públicas y de esta forma garantizar «la cantera» de este colegio. En el Santa Marina se han baremado las solicitudes con los mismos requisitos que en otros procesos de admisión de la consejería.