Los colegios concertados afectados por las irregularidades en los documentos presentados por padres solicitantes de plazas de Educación Infantil y primero de Primaria comenzaron ayer a trasladar los cambios introducidos en la baremación de 241 alumnos, por la Dirección de Educación, a la nuevas listas provisionales, que algunos ya expusieron ayer y hoy lo harán todos.

En algún colegio, como en Los Salesianos, se celebró un sorteo por la tarde entre los alumnos no admitidos y con igual puntuación. Una vez expuestas las nuevas listas, los padres tiene dos días para hacer alegaciones.

Asimismo, la Federación de Asociación de Padres de Alumnos de Centros Públicos (Freapa) hizo público un comunicado, en el que exige a la Junta de Extremadura "un mayor control de los centros concertados" en el proceso de matriculación, ante las irregularidades detectadas en 241 expedientes de matriculación, como señaló su portavoz, Rafael Delgado.

El colectivo pide que "se garantice el derecho de los padres a obtener plaza para sus hijos en el centro que legalmente les corresponda" y que "las direcciones son conocedoras y consentidoras de lo que estaba sucediendo". Delgado señaló que "si se tuviera que tomar alguna medida debería ser contra los propietarios de los centros y no contra los padres", así como que a los centros privados concertados se les debe exigir rigurosidad "e impedir que seleccione al alumnado, evitando así que la escuela pública se convierta en subsidiaria de la privada".

Por otro lado, el PP achaca la "avalancha" de solicitudes en centros concertados a que los padres "rechazan enseñanza pública de Ibarra", según dijo su secretario general, César Díez Solís, en Mérida. Y lamentó que se registren 251 irregularidades. En su opinión, esta situación conlleva una serie de datos como que el 46% de los alumnos extremeños sean repetidores, que el abandono escolar afecte al 35,4% de alumnos, y que el fracaso escolar esté en el 33%.