Los equipos directivos y las ampas de los colegios Juventud y Luis Vives aprovecharon ayer la visita que realizó la consejera de Educación, Eva María Pérez, a ambos centros para trasladarle algunas de sus demandas, casi todas centradas en la mejora de las instalaciones.

En el caso del colegio Juventud, en Pardaleras, los problemas de humedad que arrastra el edificio desde la riada han afectado a todo el solado y a los zócalos. Asimismo, han planteado la construcción de un porche y han solicitado nuevo mobiliario.

Pérez, quien recordó que en el Juventud se está construyendo en estos momentos un comedor que ha supuesto "una inversión importante", se ha comprometido a que un técnico visite el centro para valorar las necesidades y en función de las "disponibilidades presupuestarias y la urgencia" se le dará respuesta.

En el colegio Luis Vives, la prioridad es un problema con la tubería principal de la red, que afecta al suministro de agua en algunos aseos, y la humedad en un edificio anexo. Un técnico revisó ayer las instalaciones para buscar solución. Además, también han planteado la necesidad de ampliar el gimnasio, añadiendo parte del patio, porque ahora los alumnos tienen que salir a diario al pabellón Nuria Cabanillas, y elevar el cerramiento del patio de recreo.

COMPETENCIA MUNICIPAL Asimismo, desde la ampa han trasladado otros problemas que, en su mayoría, competen al ayuntamiento, como la necesidad de asfaltar la entrada --que en días de lluvia se llena de barro-- o la señalización vial alertando de la cercanía de un colegio.

Pero la visita de la consejera a estos centros no se circunscribió únicamente a escuchar las demandas de los profesores y padres. Eva María Pérez también pudo conocer "los magníficos resultados" en el alumnado de la sección bilingüe de Francés en el colegio Juventud. En el Luis Vives, mantuvo visitó tres aulas para charlar con los alumnos, que le entregaron algunos dibujos. La consejera también visitó ayer el instituto de San Roque.