Luis Angel Ruiz de Gopegui Santoyo es uno de los mejores periodistas que ha habido en Extremadura. Lo que pasa es que Luis es humilde y físicamente bajito y su actitud y su imagen externa a lo mejor no dan idea de su talla profesional, intelectual y humana. Yo tuve la suerte de tenerle como redactor jefe durante muchos años en el periódico Hoy y lo triste es que no fuese él el director, teniendo mucha más valía y capacidad para el puesto que el titular, a pesar del cual --y muchas veces con su oposición-- logramos en aquella Redacción, con la ayuda de profesionales como Gopegui, hacer uno de los mejores periódicos de provincias de España.

Luis acaba de presentar en Badajoz su libro Compromiso con Extremadura , que recoge una selección de los artículos que publicó en Hoy durante los muchos años que trabajó en este medio. Luis siempre ha sido un hombre comprometido en el más amplio sentido de la palabra. Comprometido con sus propios principios y valores, comprometido con el prójimo y, por supuesto, con Extremadura. Su mérito es doble en lo tocante a la extremeñidad, porque a él no lo parieron aquí. Es un extremeño voluntario que lo es tanto como los nacidos en esta tierra y más que muchos de los nativos a los que se les llena la boca con Extremadura pero que aportan más bien poco a su entidad y a su futuro.

Palentino de nacimiento, se extremeñizó hasta el tuétano cuando más falta hacían extremeños como él, inteligentes, valientes y comprometidos, en aquellos años negros de la dictadura y en los años esperanzadores de los albores democráticos. El hizo mucho, desde su responsabilidad como periodista, como intelectual y como hombre, para que Extremadura fuese mejor, para que nuestra tierra fuese lo que hoy es. Si hay alguien que merece la Medalla de Extremadura y el título de Hijo Adoptivo de Badajoz es él. Desde aquí propongo a las Asociaciones de la Prensa extremeñas que presenten a Luis Angel Ruiz de Gopegui Santoyo para estos galardones. Tenemos todos una deuda con él por lo mucho que ha aportado a la evolución y al progreso de esta región, a través de su labor periodística y política y a través de sus ideas y de sus escritos. Mientras tanto, lo mejor es leer su libro, que es un compendio de la historia de Extremadura de los últimos cuarenta años, vista por un extremeño de Palencia verdaderamente extreordinario .