El concurso aprobado por el Ayuntamiento de Badajoz para explotar la Escuela de Hostelería construida en la plaza Alta ha quedado desierto, una vez que ha terminado el plazo para presentación de ofertas, según confirmó ayer el teniente de alcalde, Alejandro Ramírez del Molino.

Como ninguna empresa ha querido optar a gestionar estas instalaciones, el ayuntamiento tendrá que modificar el pliego de condiciones que inicialmente ha elaborado y que, como se recordará, fue recurrido por la Confederación de Empresarios de Turismo de Extremadura (Cetex). Ramírez del Molino señaló que este recurso está todavía en manos de los servicios jurídicos del ayuntamiento y no interfiere en el proceso de adjudicación. El concejal explicó que el equipo de gobierno está reestudiando el pliego de condiciones para sacar la Escuela de Hostelería de nuevo a concurso, como ya ocurrió con La Marina, donde hubo que cambiarlo dos veces.

El presidente de Cetex, Gerardo Barredo, que desconocía que el concurso ha quedado desierto, manifestó ayer a EL PERIODICO respecto a este procedimiento que "el Ayuntamiento de Badajoz es de Mingote, por no decir de chiste", pues no puede entender cómo la Administración local todavía no ha contestado a las alegaciones que presentó Cetex, ya que el proceso "lógico y legal" es que el pliego de condiciones se exponga al público, se abra un plazo de alegaciones y sean contestadas.

De cualquier manera, a Barredo no le sorprendió que nadie se haya presentado al concurso "pues yo lo sabía desde el principio", ya que según él "no se puede presentar nadie que uno sea un loco, pues se sabe que perdería dinero". Barredo adujo que el ayuntamiento plantea esta escuela como negocio y que el adjudicatario debería invertir más de 600.000 euros para sólo 14 años.