El juzgado de lo Penal número 2 de Badajoz ha condenado a un año de prisión y al pago de más 720 euros a un hombre que formalizó un contrato con una compañía de telefonía móvil falsificando los documentos mercantiles y realizando llamadas de forma fraudulenta.

El acusado, de 46 años y natural de Badajoz, suscribió un contrato telefónico con los datos personales y bancarios de otra persona y generó facturas por importe de 505 euros entre los meses de enero y febrero de 2004. Tras la celebración del juicio oral con la conformidad por parte del acusado de las penas impuestas por el fiscal, el magistrado estimó sentencia condenatoria por delitos de falsificación de documentos mercantiles y estafa a la empresa de telefonía.

El acusado, que abonó con anterioridad al juicio el gasto telefónico, tendrá que afrontar además una multa de 720 euros durante los próximos 6 meses y las costas del proceso judicial.

Según afirma el texto de la sentencia, F. C. Z. suscribió el 13 de enero de 2004 un contrato para la adquisición de un teléfono móvil de la compañía Amena con los datos personales y bancarios de una mujer que no intervino en forma alguna en la firma y que al serle cargado los gastos, devolvió los recibos, originando un perjuicio a Amena.