El Juzgado de lo Penal número 1 de Badajoz ha condenado J. O. P. a un año y tres meses de prisión por los delitos de corrupción de menores en grado de tentativa, corrupción de menores consumada y exhibicionismo, así a sendas multas de 10 días con una cuota diaria de 6 euros por las faltas de injurias y amenazas, y prohibición de comunicar y acercarse a sus víctimas por cualquier medio durante los periodos de 1,5 y 3 años.

La sentencia considera probado que el acusado, entre abril y mayor del 2011, contactó por internet con un niño de 10 años, de quien se ganó su confianza ocultando su identidad y presentándose como Samuel Doblas, manteniendo con él conversaciones de contenido sexual, diciéndole "me voy a hacer una paja con mi novia", o que estaba encerrado en su habitación haciendo el amor con ella.

Como quiera que el menor no tenía cámara en su ordenador, a través de él obtuvo el perfil informático de otro niños de 11 años, con quien contactó como hizo con el anterior. También a éste le hizo manifestaciones como "tengo ganas de follarme a mi novia" y pidiéndole que le "enseñara la polla" y se "desnudara".

El acosador llegó a desnudarse delante del menor en dos ocasiones al tiempo que se masturbaba, "e incitaba al menor a hacer lo mismo, con total desprecio a los sentimientos pudorosos y a la inocencia que en temas sexuales es consustancial a los niños", reza la sentencia.

El niño, en un momento dado, le dijo que no quería escuchar más guarradas y que se lo iba a decir a sus padres, a lo que el ahora condenado respondió: "Si sigues así, te mato", y que "si se lo dices a tus padres, te mato a ti y a tus hermanos". Ello creó "en el menor una gran intranquilidad", según la jueza.

Según la sentencia, el acusado, "en las conversaciones mantenidas con el primero de los menores, le insultó en diversas ocasiones diciéndole 'cabrón, 'gilipollas', o que 'su polla medía un centímetro y la suya, un metro'".