El Juzgado de lo Penal ha condenado en firme a J. M. V. a dos años de prisión por un delito contra la salud pública, y a una multa de 8.000 euros. El juez considera probado que portaba 851 gramos de cannabis "para su transmisión ilícita a terceras personas" cuando fue detenido por la Guardia Civil en el kilómetro 28,5 de la carretera N-432, después de que la arrojara por la ventanilla.

Asimismo, la Audiencia halló culpable a D. P. P. del mismo delito que el anterior y le impone pena más multa de 518 euros, tras hallarlo culpable de los hechos ocurridos en marzo del 2004, cuando fue sorprendido en Badajoz con un bote con 50 comprimidos de éxtasis, que entregó a un menor para trasladarlo a Talavera la Real para su venta.

Igualmente, la misma sala condenó, de conformidad, a R. R. N. A. a un año seis meses de cárcel, por otro delito contra la salud pública, cometido el 21 de julio del 2002. la Guardia Civil le detuvo con 54,6 gramos de cocaína después de que intentara deshacerse de ella arrojándola bajo el coche. Los agentes sospecharon que la droga estaba destinada al tráfico ilícito.