La Audiencia Provincial de Badajoz ha condenado a un joven a dos años y tres meses de prisión después de que la Policía Nacional le interceptara en la estación de autobuses de la capital pacense con algo más de 3.000 euros falsos, que llevaba dentro de una mochila.
La fiscalía, que inicialmente pedía cinco años y nueve meses de prisión, y el abogado defensor han llegado a un acuerdo para fijar la pena finalmente impuesta:dos años por falsificación de moneda y tres meses por resistencia a la autoridad, según han informado a Efe fuentes judiciales.
Los hechos por los que se juzgaba al joven se remontan al año 2013, cuando una llamada anónima alertó a los agentes de que un hombre que viajaba en un autobús portaba encima dinero falso. El sospechoso fue localizado entonces en la estación de autobusesde la ciudad, donde los funcionarios de la Policía Nacional comprobaron al proceder al registro de sus pertenencias que ocultaba esa cantidad en billetes falsos de 50 euros
Al ser interrogado por los agentes sobre la procedencia de esos billetes, el joven alegó en su defensa que desconocía la forma en la que ese dinero falso habría llegado hasta la mochila que transportaba y planteó la posibilidad de que otra u otras personas se lo pudieran haber introducido en la estación de autobuses donde inició su viaje, en la ciudad de Barcelona, con la intención de utilizarlo como «transporte» sin que él tuviera conocimiento de ello hasta ese momento.
El hecho de que no se haya podido demostrar cómo llegó el dinero a su mochila ha servido de atenuante para reducir la condena del acusado.
Además, se da la circunstancia de que el joven venía a Badajoz para resolver otro asunto pendiente con la Justicia, por lo que también adujo para desvincularse de los hechos por los que ha sido condenado que sería «absurdo» que se arriesgara a transportar dinero falso.
Durante la detención del joven, uno de los agentes policiales que lo interceptaron en la estación de autobuses sufrió un resbalón en el forcejeo con el condenado, motivo por el que a los dos años de privación de libertad por falsificación de moneda, se han añadido otros tres meses más de cárcel por resistencia a la autoridad. H
