Un conductor de 22 años, que presentaba síntomas de embriaguez, empotró ayer su vehículo contra otro coche que estaba aparcado y que a su vez causó daños a otros dos estacionados. El accidente ocurrió a las 6.55 de la mañana cuando el vehículo conducido por el joven, cuya identidad responde a las iniciales J. L. N. C., no debió coger bien la curva y fue a chocar contra un vehículo aparcado, que prácticamente ha quedado siniestro total, según ha informado la Policía Local. Tras el choque, el conductor aparcó su coche, un Nissan, y se dirigió al Perpetuo Socorro para ser curado de sus heridas, siendo localizado por los agentes policiales.

Aunque no reviste gravedad, el joven presentaba traumatismo craneoencefálico con una herida en los labios, que impidió que se le hiciese la prueba de alcoholemia aunque se ha pedido la extracción sanguínea pues presentaba síntomas de estar bajo el efecto de bebidas alcohólicas. En el coche viajaba otro amigo, que no sufrió heridas de gravedad y que según declaró llevaba puesto el cinturón, como al parecer también el conductor, pues de no ser así habría roto el parabrisas con la cabeza.

Esa noche, un coche que salía del puente Real cruzó en diagonal la rotonda de Ifeba, donde quedaron piezas del motor.