Un joven de 20 años, que dio positivo en la prueba de alcoholemia, empotró el domingo por la mañana su coche contra una vivienda y un bar de la avenida Nuestra Señora de Bótoa. Los hechos ocurrieron sobre las siete de la mañana, cuando el joven circulaba a una velocidad excesiva por esta vía y perdió el control del vehículo, un Renault Megane, hasta impactar primero con la fachada del bar Eloy, causando daños en el zócalo y la puerta, y después contra la pared de una vivienda, provocando desperfectos en el exterior y el interior de la misma.

A pesar del impacto, el conductor, identificado como J. M. S. S., resultó ileso. El vehículo, según los testigos, quedó totalmente destrozado. "Fue un impacto grandísimo, lo escucharon todos los vecinos. Chocó contra las fachadas y quedó mirando para los pisos de enfrente ", comentaron.

Nuria Cortés y Enrique Rojas son los dueños del bar Eloy. Cuando ocurrió el accidente el establecimiento estaba cerrado y así tuvo que permanecer el resto del domingo pues, según explicaron ayer, el golpe "desencajó la puerta y tuvimos que lijarla para poder vencerla". "Hemos perdido unos 500 euros", aseguró el propietario, quien se quejó de que además habían tenido que perder mucho tiempo con el papeleo porque "el conductor no tiene seguro".

Los fines se semana, los dueños del bar suelen colocar veladores en la acera por lo que si el accidente se hubiese producido a una hora en la que el bar está abierto las consecuencias hubieran podido ser mucho más graves.

El otro inmueble afectado pertenece a una anciana que vive en otra casa con su hija, aunque suele visitar su vivienda, según los vecinos. El coche impactó contra la fachada, que quedó hundida, y causó desprendimientos en la pared de una sala. "La habitación ha quedado completamente cubierta de ladrillos, se ha caído toda la pared", explicaron.

Los vecinos denunciaron que los coches circulan por esta vía a una velocidad excesiva y reclamaron que se coloquen bandas reductoras para que los conductores aminoren su marcha --hace años incluso llegaron a recoger firmas para que se tomaran medidas--. "Hasta que no pase algo grave no harán las cosas como se tienen que hacer", lamentaron.