Hay que modernizar los procedimientos para la formación de intérpretes e investigadores, y establecer nuevos títulos para formar a profesionales competentes. Hemos de ser ambiciosos e innovadores y abrirnos a nuevas disciplinas como la música antigua, el jazz y el flamenco". Así lo reivindicó Miren Gabirondo, directora del Conservatorio Superior 'Bonifacio Gil', en la inauguración oficial del curso,ayer en el salón de plenos de la diputación, de la que depende, como el de Grado Profesional.

Gabirondo señaló que "son 90 años con la ilusión compartida por la docencia. Y este curso es especial porque finalizan sus estudios los alumnos formados en en los nuevos planes europeos". Y resaltó que el conservatorio "no está sólo para formar músicos sino personas en toda su integridad, ya que la calidad técnica debe armonizarse con la humana".

También Yolanda Sánchez, directora del Conservatorio Profesional 'Juan Vázquez', reclamó apoyo a la formación musical, por "su repercusión positiva en los niños --en lógica, lenguaje, memoria, expresión corporal, desarrollo mental, ritmo, armonía--, pues un bebé integrado en un ambiente musical desarrolla más y mejores estímulos y refuerza los lazos afectivos con sus padres", afirmó.

Valentín Cortés, presidente de la diputación, inauguró el curso, cuya lección inauguración impartió el profesor y pintor Francisco Pedraja, y destacó el "excelente nivel" de los centros, "de los centros más prestigiosos de España, como lo prueba que se matriculen alumnos de comunidades alejadas", dijo.

Recordó que estos centros son una competencia impropia recogida en el borrador de la Ley de Administración Local, si bien, dijo, mientras dependan de la diputación, contarán con los medios para impartir una formación de calidad como hasta ahora.