La empresa pacense Construcciones y Restauraciones Olivenza se encargará de acometer las obras de rehabilitación del Fuerte de San Cristóbal, después de que su oferta haya sido la elegida entre las 16 que concurrieron para ejecutar este proyecto por ser la más "ventajosa" tanto económica como técnicamente, según informó ayer el portavoz municipal, Francisco Javier Fragoso, tras la reunión de la Junta Local de Gobierno.

Las obras se han adjudicado por 1.340.783,44 euros, lo que supone una baja de en torno al 10% con respecto al presupuesto base de licitación (1.489.759 euros) y una de las mejoras de la propuesta es reducir en un mes en el plazo de ejecución (de seis a cinco meses, lo máximo que se permitía). El portavoz municipal recordó que en el pliego de condiciones se limitaron tanto la baja presupuestaria como la disminución del plazo para realizar los trabajos por tratarse de obras "muy delicadas al tocarse el patrimonio".

Según señaló Fragoso, está previsto que el contrato se firme el próximo lunes y que entre el martes y el miércoles se haga el acta de replanteo, por lo que calculó que las obras podrán comenzar a finales de este mismo mes. La actuación debe estar concluida antes del 30 de junio, fecha límite de la prórroga que el ayuntamiento solicitó a Europa, que financia el proyecto Baluartes --en el que se incluye la rehabilitación del Fuerte-- a través del Programa Operativo de Cooperación Territorial entre España y Portugal (Poctep) con una ayuda total de 2,9 millones de euros.

El portavoz municipal recordó que ya se están ejecutando los trabajos arqueológicos, que el ayuntamiento decidió adelantar para "ir ganando tiempo", lo que --defendió-- prueba el "mimo" con el que se está tratando este proyecto. Asimismo, con respecto a las críticas que ha suscitado la intervención prevista entre algunos colectivos ciudadanos, Fragoso reiteró que el equipo de gobierno tiene la conciencia "sumamente tranquila" por la decisión y se mostró convencido de que será una "magnífica rehabilitación". La actuación contempla la recuperación de la muralla y nuevas edificaciones en el interior, donde habrá un centro de interpretación, un salón de celebraciones, cafetería y zona de acogida.

Destacó que este es el proyecto que más ocasiones ha pasado por la Comisión de Patrimonio, hasta cinco veces, y todas ellas con dictámenes positivos y con el único voto en contra del representante de un colectivo ciudadano, de Amigos de Badajoz. A su juicio se trata "de un problema más de gusto", porque --dijo-- hay a quienes les hubiera gustado interpretar el monumento en función del siglo XX, cuando el ayuntamiento entiende que hay que hacerlo conforme al siglo XVII.

"Creo que es una muy buena rehabilitación y que, legalmente, desde el punto de vista patrimonial y urbanísticamente, es escrupulosa y exquisita", subrayó. Fragoso añadió que está convencido de que cuando se vea el resultado "estarán de acuerdo".