Un grupo de 36 vecinos, propietarios de otras tantas viviendas de una manzana de la urbanización Guadiana, colindante con las calles Castillo de Villagarcía de las Torres y de Olivenza, han ganado un juicio contra la empresa Donkasa, que construyó sus casas, debiendo ésta reparar los desperfectos de las mismas, por mandato de una sentencia judicial.

Los afectados manifestaron a EL PERIODICO que "somos los primeros que tenemos sentencia, a nuestra favor, porque fuimos los primeros en venirnos a vivir, pero hay otros 10 grupos que están en litigio con la misma empresa". La sentencia establece un calendario para el traslado de los enseres de cada familia a un guardamuebles, la primera de las cuales lo realizó ayer, mientras que los vecinos se alojarán en un hotel cercano los 15 días que duren las obras indicadas por la juez.

Dicho calendario prevé, en principio, las obras en cuatro viviendas unifamiliares. Los problemas cuya solución demandaron los vecinos afectan a las medianeras entre viviendas (con baños, cocinas, dormitorios y áticos), pues "la verdad es que orinas y se oye caer la gota en la casa siguiente", manifestó uno de ellos.

El litigio comenzó en 1999, al no lograr que la empresa les hiciese las reparaciones demandadas. Una vez que hubo sentencia, lograron un acuerdo económico, que se rompió porque la constructora ofreció pagar a plazos, aseguraron.

Los vecinos se unieron para acudir a la justicia, y uno de ellos asegura que "hemos logrado el embargo de 39 millones de pesetas, aunque tendremos que contratar un aparejador que compruebe que las obras se realizan conforme al fallo, porque tenemos miedo, al ser la misma empresa la que hará el trabajo". EL PERIODICO intentar comunicar telefónicamente con esta empresa, pero no fue posible durante la tarde de ayer.