Los propietarios del edificio entre la calle Norte y Encarnación, ante hacer cualquier intervención deberán hacer un estudio para documentar los elementos que indican que se trata de la primera sinagoga de Badajoz, según ha el director general de Patrimonio, Francisco Pérez Urban, quien señaló que hay un informe de la Oficina del ARI (Area de Rehabilitación Integral).

El edificio que en la actualidad alberga cuatro viviendas es propiedad privada, que deberá hacer un estudio previo a su rehabilitación, pues no cabe otro tipo de actuación, en principio, según Pérez Urban. Hay columnas, arcadas, una nave abovedada con conducción de aguas y otros elementos que indican que en ese lugar hubo un complejo que pudo ser el primer templo judío, de los siglos XI al XIII.

Pérez Urban afirmó que Patrimonio no pretende poner dificultades, sino colaborar con para hacer la ciudad habitable, siempre respetando la ley. El edificio tiene protección ambiental en el plan urbano y se encuentra en revisión en el Plan Especial del Casco Histórico, por lo que "hay que estar vigilante para que se resuelva esa duda hasta que el ayuntamiento le dé la protección que crea conveniente".