Cuatro encapuchados armados con pistolas atracaron ayer al propietario del desguace Bru, situado en la carretera de Sevilla, que salió ileso a pesar de recibir dos disparos de los asaltantes.

Los hechos ocurrieron sobre las doce de la mañana, cuando cuatro personas llegaron en dos motos al desguace armadas con pistolas y con la cabeza cubierta por el casco y un pasamontañas. Tras dar una patada a la puerta, entró uno de ellos en la oficina, donde se encontraba Rafael Bru y la cajera. La mujer consiguió huir, pero a él le encañonó con el arma y le pidió el dinero. "Le abrí el cajón y le dí lo que había, pero le pareció poco y me pidió la caja fuerte, le dije que no tenía".

Fue entonces cuando forcejeó con el encapuchado, "le aparté el arma para evitar que me diera en el cuerpo y se disparó hacia el suelo", explicó la víctima. En este momento entró el segundo atracador y también forcejeó, por lo que cayeron al suelo. Rafael no sabe cómo pero cogieron el dinero, algo más de 2.000 euros, y huyeron. Al salir a la puerta para tomar la matrícula volvieron a dispararle, esta vez le salvó el quicio de la puerta.

La víctima, que reconoció estar vivo "de milagro", dijo que venían de Badajoz y huyeron en dirección a Sevilla. Rafael no se ve como un valiente, "no volvería a hacerlo, lo vi tan negro que reaccioné así", señaló. La Policía Nacional recogió pruebas e investiga los hechos.