El primer fin de semana del programa Un barrio vivo que ha iniciado la Asociación de Vecinos del Casco Antiguo para llenar de vida las plazoletas y espacios peatonales del centro histórico, ha superado la prueba de la climatología, a pesar de que las actuaciones del mediodía del pasado viernes tuvieron que suspenderse por causa de la lluvia, pues las de la tarde y la noche se celebraron con una afluencia de público, repetida ayer, que ha hecho pensar a los promotores que debe tener continuidad.
Cientos de personas han acudido a los conciertos, actuaciones de flamenco, recitales de canto, teatro de calle y espectáculos de danza, ballet y capoeira que se han movido por el centro desde el mediodía hasta la noche. La idea de la asociación para aprovechar que en el barrio viven más de 300 artistas de todas las disciplinas, "ha sido un éxito", según el presidente de la asociación, Juan Pedro Plaza.
No hace falta que sea de noche para saborear el flamenco o un baile como los de Esther Merino y el cuadro de Cristina Delgado con el guitarrista Francis Pinto; escuchar al coro de voces blancas Simile en la plaza de La Soledad y a los alumnos del Conservatorio en la calle San Juan.
DANZA EN LA PLAZA ALTA Al anochecer, la danza de Coppelia, el ballet del Estudio de Badajoz y la capoeira de Topazio tomaron la plaza Alta. El escenario se trasladó a San Andrés, pero no acudieron los alumnos del Conservatorio y ni PVC; sólo el grupo Yonko. La noche empezó con flamenco de nuevo en La Soledad.
El consejero Francisco Muñoz asistió al inicio de los actos, en los que participa la Consejería de Cultura, la diputación y el ayuntamiento, y afirmó que la idea es convertir el Casco Antiguo en un "modelo cultural" y hacer de él un escenario, un plató o una factoría de creación.
Plaza manifestó que "ha sido sorprendente la respuesta de los creadores que viven en el barrio", porque "individualmente y en grupos se han puesto a disposición de la asociación, a veces solo el gusto de salir a actuar".
Lourdes Murillo, pintora que trabaja y vive en el Casco Antiguo, expresó su deseo de que "esto debería ser así durante todo el año; con iniciativas como ésta, favoreciendo el comercio y el turismo, se puede sacar partido".
Antonio Manzano, de Amigos de Badajoz, alabó la iniciativa de la asociación de vecinos "porque fíjate cómo está la calle de gente; es por lo que venimos peleando hace muchos años. Anoche presentamos un libro en el antiguo ayuntamiento, tuvimos asamblea en Pajaritos y parecía mentira ver tanta gente y la plaza Alta iluminada, es un sueño".
La asociación de vecinos se vuelca ahora en reivindicar la recuperación del mercado de Santa Ana, por ello pedirán a los partidos que lo asuman en sus programas y anuncia sorpresas para llamar la atención.
