La Policía Local de Badajoz denunció el pasado sábado por la noche a una prostituta y a su cliente tras comprobar que estaban negociando y aceptando un servicio de prácticas sexuales a menos de 500 metros de una zona residencial y de afluencia infantil y juvenil, incumpliendo así la ordenanza municipal. Los hechos tuvieron lugar en la avenida Manuel Rojas Torres, en la Ronda Norte, sobre las 21.30 horas y fueron varios vecinos de la zona quienes alertaron a la policía tras percatarse de la presencia de una mujer en las inmediaciones que estaba ofreciendo servicios sexuales.

La ordenanza prohíbe el ofrecimiento, solicitud, negociación y aceptación directa o indirecta de servicios sexuales retribuidos en el espacio público con sanciones que oscilan entre los 750 y los 3.000 euros.