A lo largo del 2009, la Policía Local de Badajoz interpuso 202 denuncias contra locales públicos por el incumplimiento del horario de cierre, lo que significa el triple que el año anterior, que llegaron a 68. El motivo de este incremento, según explicó ayer el jefe accidental, Antonio Nogales, es que la orden del concejal responsable, Germán López Iglesias, es de "tolerancia cero" respecto al cumplimiento de los horarios.

También se incrementaron las intervenciones relacionadas con el botellón. En total, el año pasado hubo 87 denuncias por consumir alcohol fuera de las zonas autorizadas (que solo son tres: el paseo Fluvial, el Nuevo Vivero y el ferial), frente a las 62 del 2008. La mayoría de los denunciados (el 58%) tienen entre 18 y 30 años, mientras que el 20% son menores. Asimismo, los agentes pusieron 15 denuncias a tiendas de conveniencia por vender alcohol después de las diez de la noche y 2 por hacerlo a menores.

Precisamente el ocio es una de las áreas que "más trabajo nos da", según reconoció Nogales, quien adelantó que entre los proyectos de la Policía Local está, cuando se incremente el número de efectivos, la creación de una unidad específica de control del ocio que se hace cada día más necesaria en una ciudad de servicios como Badajoz. Este tipo de unidad existe en Madrid. Nogales hizo referencia a la dificultad de erradicar los botellones espontáneos, como el que han logrado eliminar en el lateral del Carrefour de Valdepasillas, donde los agentes eran recibidos a "pedradas con cubitos de hielo" que incluso llegaron a romper alguna luna de los coches policiales. El jefe policial recordó que la multa por consumir alcohol fuera de lugares autorizados es de 300 euros.

Nogales compareció junto a López Iglesias para hacer balance de las actuaciones de la Policía Local el año pasado, a lo largo del cual se atendieron 78.000 llamadas, con una media diaria de 230 (frente a las 212 del 2008). En materia de seguridad ciudadana hubo 2.078 intervenciones.